El alemán Sebastian Vettel, a bordo de su Ferrari, se coronó en el Gran Premio de Bahréin, escoltado por los Mercedes del británico Lewis Hamilton y el finlandés Valtteri Bottas, lo que le permitió despegarse como único puntero del Mundial de Fórmula 1.

Es el 44º Gran Premio que gana Vettel, que a finales de marzo en Australia, en la primera carrera de esta temporada, había puesto fin a dieciocho meses de sequía para él y para su escudería.

Disputada hoy la tercera fecha de la temporada, Hamilton quedó a seis segundos de Vettel y tendrá que lamentar la penalización de cinco segundos que recibió por haber frenado delante del australiano Daniel Ricciardo (Red Bull) en la entrada a boxes.