Por Fabrizio Turturici

«Un partido de locos» es como se le llama popularmente a este empate de 2 a 2 que protagonizaron Rosario Central y Central Córdoba de Santiago del Estero, ya que se dio una dinámica abierta, de transiciones rápidas y nula contención en la zona media.

El Canalla tenía los tres puntos en el bolsillo cuando, en la última jugada, Milton Giménez ejecutó un gran tiro libre para establecer la igualdad en el Gigante de Arroyito, justa porque ninguno fue superior al otro pero dolorosa por el momento en que llegó.

Para empezar con el análisis, es necesario subrayar los descalabros defensivos del equipo del Kily González, que nunca hizo valer la línea de cinco y tuvo pérdidas por todos lados, a espalda de los laterales-volantes o bien entre los zagueros que no escalonaban.

Esta vez, a diferencia de la solidez que había encontrado en el anterior empate con Colón, el mediocampo quedó descompensado ante un rival de rápidos avances, Sangiovani y Villagra no hicieron pie en el retroceso y el sector izquierdo de Blanco fue el más vulnerado.

Con la posesión a favor hubo poca movilidad y desmarques de parte de los jugadores auriazules, que nunca se mostraron como opciones de pases para los trasladores. Pero lo que le faltó de fútbol lo suplió -y muy bien- con empuje y pinceladas de Vecchio.

Así llegaron los dos goles del elenco de Arroyito que tuvieron a Martínez como protagonista, el primero posibilitando que Marco Ruben de penal se coloque como tercer goleador histórico del club, y el segundo capturando un rebote para mandarla adentro.

Sin embargo la alegría le duró poco, ya que Sequeira al arranque del complemento y Giménez al final del mismo pusieron en tablas el resultado, lo que lo terminó siendo raro: ya que así como pudo haber hecho 5 goles, también los pudo haber sufrido en arco propio.

La realidad es que Central dejó pasar una gran oportunidad de subirse a lo alto de la tabla, y si bien el rival era complicado por los buenos resultados que venía obteniendo de visitante, ahora deberá recuperarse en cancha de San Lorenzo para no perder el tren.