Por Santiago Fraga

Tras meses de polémica e idas y vueltas, finalmente esta tarde se aprobó la implementación de la Súper Liga como nueva modalidad de organización y competencia en el fútbol argentino. Pese a tener muchos detractores, la Asamblea Ordinaria aprobó por 70 votos a uno el visto bueno. Enterate los puntos claves para entender este torneo, que ahora será el presente del fútbol argentino.

  • Estructura independiente

Por un lado, el punto más importante es que tanto la Primera División como la primera categoría del ascenso, hoy Nacional B, se manejarán de manera independiente de la Asociación del Fútbol Argentino, con otros dirigentes, pero siempre bajo la órbita de dicho ente. Esta modalidad es la adoptada en otros países como España (aunque allí la liga también se maneja por fuera de la Federación), Italia e Inglaterra, donde así también los dirigentes manejan los recursos que genere la liga a su forma. Para la AFA quedará, entonces, todo el ascenso, tanto en la zona afiliada (B Metropolitana, C y D) como los Torneos Federales, más el Consejo Federal, así como también la Selección Argentina y el resto de las selecciones. Por su parte, la Copa Argentina seguirá rigiendo por parte de la AFA, así como la representación de los equipos en las copas internacionales (Libertadores y Sudamericana), para las cuales elevarán una propuesta para que se disputen de manera anual (como la Champions y la Europa League). El Tribunal de Disciplina y la designación de árbitros seguirá corriendo por parte de la Asociación del Fútbol Argentino.

  • Porqué

El principal motivo por el que los dirigentes más importantes de los clubes argentinos llevaron adelante este proyecto es… la plata. Esta independencia de la AFA le otorga la libertad tanto a los clubes como a quienes manejen la Superliga de hacerse cargo de todo el manejo y distribución del dinero que generen. Transmisiones por TV e Internet, derechos internacionales, publicidad, licencia y marketing de todo tipo generará ingresos directos a este ente. De hecho, ya ha habido contactos con cadenas televisivas, pese a que hasta 2019 continúe el Fútbol Para Todos. Hasta dicho año el fútbol seguirá siendo gratuito, pero luego habrá que comenzar a pagar para ver.

  • Modo de juego y descensos

En cuanto a lo futbolístico, será un torneo largo, sin demasiadas diferencias a lo que se venía viendo, con 30 fechas de disputa desde agosto a mayo, en dos zonas, todos contra todos, ida y vuelta y con la fecha especial de clásicos. La principal novedad es que el fixture estará armado de antemano y no debería sufrir cambios, algo típico en el fútbol europeo. Desde la próxima temporada y hasta el 2020, habrá cuatro descensos y dos ascensos, para así normalizar el número de equipos a 20. En la 2017-18 habrá 28 equipos, en la 2018-19 habrá 26, en la 2019-20 quedarán 24 y en la 2020-21, 22. Quedará todo normalizado en la 2021-22.

  • Consejo directivo nuevo

Pese a que la Superliga se mantendrá dentro de la órbita de la AFA, se creará un Consejo compuesto por 18 miembros (12 de Primera y 6 del Nacional B). Este Consejo tendrá un presidente, habiéndose postulado ya para el cargo Marcelo Tinelli, aunque algunos dirigentes (como Angelici) pretenden que en el cargo esté un profesional de marketing. También se crearía un Fondo de Inversión, cuyo principal objetivo será remodelar estadios.

  • Economía

Habrá un control más exhaustivo de los gastos y deudas que tengan los clubes. Se estipula también, de hecho, que desde la temporada 2017/18 los clubes que tengan deudas no puedan incorporar jugadores. El dinero de la televisión ya no pasará por Afa, sino que será distribuido directamente a los clubes en un 78% para la Primera División, 12% para el Nacional B, 8% para el resto del ascenso y 2% para la organización del campeonato. Serían $2500 millones de pesos. De este 78%, Boca y River percibirán, en el primer escalafón, 97.6 millones de pesos por año; en el segundo nivel estarán Independiente, Racing, San Lorenzo y Vélez (74.61 millones); y en el tercer nivel estarán Newell’s y Central con los 22 equipos restantes (55.59 millones anuales). Para la B Nacional quedarán 19 millones anuales, mientras que la B Metropolitana mantendrá los 40 millones que recibe de Torneos.