Francia venció 4 a 1 a Australia, cerrando la primer fecha del grupo D, en el Al Janoub Stadium, en Al Wakrah. Adrien Rabiot, Olivier Giroud (2) y Kylian Mbappé anotaron para el conjunto de Didier Deschamps, mientras que Craig Goodwin lo hizo para los de Graham Arnold.

El comienzo del encuentro fue frenético, Francia salió con todo, buscando aprovechar la velocidad de sus hombres por afuera, pero Australia no se quedó atrás.

Tal fue así que, a los 8, el conjunto de Oceanía dio la sorpresa, cuando Tras un buen desborde y centro de Leckie por derecha, Goodwin la empujó de zurda apareciendo por izquierda, al ángulo de Lloris.

 

Australia recuperaba y salía rápido, con un ritmo que le resultaba muy incómodo a los de Deschamps.

Sin embargo, en una distracción defensiva, tras un buen centro desde la izquerda, Rabiot conectó de cabeza en soledad, le cambió la dirección a Ryan y empató para el campeón del mundo.

 

Cinco minutos después, a los 32, tras un grosero error defensivo en salida, Giroud la empujó tras pase de Rabiot para dar vuelta el marcador para los de Deschamps.

 

Con la ventaja a su favor, el conjunto galo hizo circular el balón a placer, aprovechando el buen pie de sus jugadores de ataque.

A partir de ahí, Francia dispuso de ocasiones claras para liquidar la historia, pero no fueron bien resueltas en el tramo final. Incluso Australia pudo empatar a los 46, cuando un cabezazo de Irvine tras un buen centro por la izquierda dio en el palo. Así se fueron al descanso.

En el complemento, el campeón de Rusia 2018 salió decicido a terminar con el trámite. Pudo haberlo logrado con una chilena de Giroud que se fue apenas desviada, a los 3 minutos.

A los 20, un jugadón entre Giroud, Mbappé y Griezmann encontró el remate de este último,salvado en la línea por Behich.

Dos minutos después, Dembelé levantó la cabeza y tiró un centro a la cabeza de Mbappé, quine con un remate de pique al suelo amplió el marcador para el conjunto galo. 

 

A los 25, Mbappé aceleró por izquierda, desbordó y lanzó un centro preciso a Giroud, quien con un gran cabazazo estableció el cuarto tanto. Francia ganaba, goleaba y gustaba. 

 

No hubo tiempo para más. Una exhibición del campeón del mundo, quien ya en el primer partido mostró sus credenciales de camdidato, puede repetir tranquilamente en Qatar.