Los deportistas rosarinos que participaron de los Parapanamericanos 2015 también dejaron una marca en Toronto (Canadá). Es que la delegación de atletas de la ciudad que representó al país dejó bien alto al deporte rosarino y, a horas de que se clausure la máxima cita del deporte continental, lograron cinco medallas de oro.

Desde el agua y desde la pista llegaron las grandes alegrías y los atletas de la ciudad dejaron su sello en natación y atletismo. Fernando Carlomagno, Facundo Arregui, Anabel Moro y Yanina Martínez fueron los grandes protagonistas, logrando 10 medallas.

Surgida del Estadio Municipal Jorge Newbery, Yanina Martínez se colgó la medalla de oro en atletismo al imponerse en la prueba de los 200 metros T36 con una marca de 30s63, estableciendo el nuevo récord continental.

Así, la atleta que inició su carrera deportiva en AVIDA y luego pasó por Echesortu, logró su primer oro después de las dos medallas de plata y las tres de bronce que había conseguido en los dos anteriores Parapanamericanos. La hoy representante del club Río Negro es una fiel exponente del atletismo de la ciudad. Además, logró la clasificación para los Juegos Paralímpicos Río 2016.

Las otras preseas llegaron desde el agua. Fernando Carlomagno se vuelve a la ciudad con una cosecha de tres medallas: oro en 100 metros espalda S8 (marca de 1m10s34, récord del torneo), plata en 100 metros pecho SB7 y bronce en la posta 4×100 libre. “Pipo”, representante del club Echesortu, es hijo de Fernando Carlomagno (nadador paralímpico), nada desde los dos años y fue bronce en 100m libre S8 en los Juegos Parapanamericanos Guadalajara 2011. Participó en 50 y 100 libres y 100 espalda en los Juegos Juveniles Parapanamericanos 2009. Obtuvo la clasificación a los Juegos Paralímpicos 2016 con la marca realizada en 100 metros espalda.

En tanto, Facundo Arregui –nadador representante de Sportsmen Unidos– obtuvo la medalla de oro en los 400 metros libre S7 con un tiempo de 5m05s93 (récord del torneo). También logró la de bronce en la posta 4×100 libre. Facu se inició en el waterpolo (incluido en el equipo de su entidad) y desde hace tres años incursionó en la natación adaptada, obteniendo numerosos logros y su clasificación a los Paralímpicos 2016, que se disputarán en Río de Janeiro.

A su vez, Anabel Moro fue una de las deportistas más destacadas de la delegación argentina al sumar cuatro medallas, entre ellas dos doradas. La representante de ARDEC, nacida en Salto Grande pero radicada en Rosario, fue primera en 100 metros pecho SB13 (1m23s24) y en 100 metros libre S12 (1m06s87); además fue medalla de plata en 50 metros libre (30s65) y de bronce en 100 metros espalda S11-13 (1m21s88).

Moro, de 36 años, es una nadadora de elite, con una carrera deportiva impecable, pues representó siempre a la ciudad con preseas en Parapanamericanos, Mundiales y Paralímpicos y será representante en los próximos Juegos Paralímpicos Río de Janeiro 2016. Especialista en 100 metros pecho, en 2002 empezó a entrenar en Alto Rendimiento, y los resultados llegaron enseguida. Fue así que clasificó a los Juegos de Atenas y con una muy buena marca terminó novena. Después, en 2008, llegó Pekín, donde volvió a mejorar su registro y repitió la novena ubicación. Cuatro años más tarde, en Londres, clasificó en el séptimo lugar. Hoy Anabel disfruta de su hija Nadia, de 16 años, que también hace natación. Con tres Juegos Paralímpicos acumulados, ya tiene  la clasificación a Río 2016. Un privilegio de unos pocos.

Rosario también fue más que bien representada por otros deportistas nacidos en la ciudad y por otros que están radicados o que representan a asociaciones o clubes locales. En atletismo, Milagros Núñez (Club Garra Rosarina) fue 5ª en 200 metros T36. Entrena en el Estadio Municipal “Jorge Newbery”, se inició en las Olimpíadas Santafesinas hace aproximadamente tres años y a partir de su excelente actuación se insertó en el deporte federado y, al poco tiempo, comenzó a representar a la ciudad internacionalmente.

En natación, Franco Medina hizo su primera experiencia, siendo el nadador más joven de la delegación nacional.

En básquet hubo dos representantes. Entre las mujeres, Mónica Chazarreta integró el plantel del seleccionado argentino que logró la clasificación a los Paralímpicos de Río 2016 (meta que fue a buscar a Toronto). La basquetbolista era estudiante en el profesorado de educación física cuando tuvo un siniestro automovilístico a partir del cual no pudo caminar. Decidió estudiar psicología y hoy trabaja como psicoanalista. Madre de Florencia, es la representante rosarina y del básquet adaptado más experimentada, además de una jugadora indiscutible dentro de la cancha.

Entre los varones estuvo Joel Gabas, quien representa a CROL y reside en Carcarañá. Entrena en el Complejo Belgrano Centro, tiene 24 años y desde hace ocho practica la disciplina. Hace cinco años representa a la ciudad como pivot, participó en mundiales y eventos de carácter internacional en el seleccionado argentino.

También estuvieron en Toronto Maximiliano Fernández y Rodrigo Lugrin en fútbol 7 PC; ambos son oriundos de Entre Ríos pero representan a AVIDA. Mientras, Sergio Zayas, deportista residente en Rosario, nacido en la ciudad de Santa Fe, dejó una marca en Canadá: el nadador que practica desde los cuatro años y es integrante de la Asociación Rosarina de Deportes para Ciegos fue medalla de oro en en los juegos disputados en tierras canadienses. Zayas es estudiante de periodismo deportivo en un instituto terciario de Rosario.

En rugby en silla (quad rugby), Juan Herrera, que reside en Roldán, fue 5º con el seleccionado argentino. Desde muy pequeño practicó natación en AVIDA, incursionó en quad rugby desde hace aproximadamente cinco años y hoy es un jugador indiscutible en el equipo.

También estuvieron en Toronto Domingo Patrone, como técnico de la selección argentina de básquet sobre silla de ruedas; Laura Pagola, kinesióloga del elenco femenino de básquet (representa a Central Córdoba) y Silvio Falcone, del seleccionado de básquet masculino.

De esta manera, los atletas de la ciudad cerraron una actuación más que destacada en los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos de Toronto, demostrando una vez más, que el deporte rosarino se encuentra en el más alto nivel de competitividad.