Por Tomás Labrador
Sostenido por la racha inicial de cinco triunfos consecutivos, Rosario Central se mantiene, a pesar de los cinco empates en lo últimos seis partidos, en una posición expectante con 23 puntos y ahora a cuatro del líder Boca.
El principio del campeonato mostró a un Central con otra impronta respecto al equipo que dirigía Miguel Ángel Russo y a pesar de no generar un gran volumen de juego en los primeros partidos consiguió sendos triunfos que lo catapultaron a la cima de la tabla. En un campeonato tan igualado como el argentino, los lugares de privilegio se definirán por las rachas que consigan hilvanar los equipos, como dijo el entrenador Eduardo Coudet, y por los resultados de los duelos individuales, ya que esos partidos de alguna manera se tornarán más importantes al ser, salvo los clásicos, un enfrentamiento a único partido, donde el ganador se llevará los tres puntos y el perdedor no podrá recuperarse.
Paradojas del fútbol
No se descubre nada decir que el fútbol no es una ciencia exacta y que lo impensado de su dinámica, parafraseando a uno de los grandes maestros del periodismo deportivo del país, lo hace tan atractivo para millones de personas alrededor del mundo. Pero Central, que en las primeras fechas careció de volumen de juego, estuvo dotado de pegada, gracias a un Marco Ruben genial que aportó ocho goles en las primeras ocho fechas y extrañamente al levantar en volumen de juego, algo esperable al sumar jornadas de trabajo, con un entrenador que hace falta recordarlo recién lleva cuatro meses de trabajo con el plantel, no ha podido traducir la mejora de su juego, en goles en el arco rival.
Goles son amores
En cuanto al balance de goles a favor y en contra, Rosario Central es el peor de los cinco primeros del campeonato: 17 goles a favor y 10 en contra tiene el Canalla, una diferencia de +7 frente a los 20-5 de Boca o 17-6 de San Lorenzo. Además sólo en tres de los once partidos disputados hasta el momento el equipo auriazul consiguió dejar su arco en cero (ocurrió en el primer partido con Racing y repitió frente a Crucero del Norte y Temperley, los tres terminaron en triunfo y en los tres le alcanzó al equipo del Chacho con convertir un gol).
Vaso medio lleno o vaso medio vacío
Sólo Boca y Central consiguieron llegar a esta altura del torneo manteniendo el invicto. Boca con un balance de 8 ganados y 3 empates y Central con 6 triunfos y 5 igualdades, lo que se traduce en una diferencia de 4 puntos a favor de los xeneizes, sin dudas el equipo que cuenta con el mejor y más extenso plantel del fútbol argentino.
Tiene margen de mejora el equipo del barrio Lisandro de la Torre y los últimos partidos así lo demuestran, aunque esa mejora, paradojas del fútbol, no se tradujo en victorias, algo que tendrá que revertir el equipo para no perder fuelle en el torneo y continuar creciendo.
