Newell’s arrancó con mayor intensidad, y buscó doblegar a su rival ya desde inicio del encuentro. Anticipaba y cortaba rápido, con el objetivo de salir rápido para agarrar a la visita mal parado.

A los 4 minutos, La Lepra tuvo su primera llegada. Desborde de Méndez por derecha y cabezazo de Garro como centrodelantero, contuvo Mansilla sin problemas.

A los 6, tras un centro desde la izquierda, Juanchón García conectó anticipando a su marcador pero le falto justeza a su derechazo termine dentro del arco entrerriano.

Newell’s tuvo otra clarísima a los 10, cuando tras una gran jugada de Luciano, Garro asistió de zurda a García, quien con esa pierna también en soledad remató abajo del arco y su disparo se fue apenas arriba del arco visitante. La Lepra era más y merecía el primer tanto.

El Patrón tuvo su primera aproximación recién a los 21, con un remate de Leys de media distancia muy desviado del arco de Macagno.

Luego de eso, Patronato se acomodó mejor en la cancha y el partido se acható. Ninguno se imponía en la mitad de la cancha y la posesión era repartida. Las jugadas de peligro escasearon. Newell’s se quedó luego de esa ráfaga de los 15 iniciales. Así se fueron al descanso.

El complemento arrancó con la misma tónica, incluso con Patronato animándose un poco más, y complicando por el sector de Gudiño.

A los 7, el debutante Herrera (ingresó por Macagno, lesionado) contuvo un remate débil de media distancia de Diego García. Se jugaba como quería la visita.

A los 18, Ditta salvó con el hombro cuando Rodríguez intentó picarla mano a mano ante Herrera, tras un error del juvenil arquero leproso.

Todo cambió a los 33, cuando Sordo, con un derechazo cruzado al segundo palo de Mansilla tras centro de Giani por la derecha, abrió el marcador para La Lepra.

A los 40, Herrera tuvo una tapada clave ante su homónimo de Patronato mano a mano, luego de que este último eludiera a dos jugadores leprosos.

No hubo tiempo para más, sin jugar bien, La Lepra obtuvo un trabajoso triunfo, que lo vuelve a meter en el lote de los de arriba. La ilusión sigue intacta