El Comité de Seguridad de la Nación dispondrá este miércoles que tanto Boca como River jueguen sus próximos partidos de local a puertas cerradas por diversas irregularidades.

A pesar que el «xeneize» presentó un descargo por los hechos de violencia registrados en el Superclásico de la Copa Libertadores, el organismo dependiente de Sergio Berni dispuso que este domingo ante Newell’s no haya público.

Además, el Comité de Seguridad hará oficial en 48 horas que River-Temperley, que se jugará después del receso por la Copa América, se disputará a puertas cerradas porque el «Millonario» no arregló unos molinetes que habían sido objetados con anterioridad.

Boca había sido sancionado por el escándalo en La Bombonera ante su histórico rival por el duelo copero y por ese motivo el encuentro frente a Aldosivi, por la décimo tercera jornada, se disputó sin gente.

Como había sido penado con una fecha preventiva, el descargo que presentó la institución sobre el episodio del gas pimienta no fue considerado suficiente y por eso se le amplió el castigo para el encuentro ante la «Lepra», que se disputará este domingo a partir de las 18.15.

Fuentes del Comité de Seguridad indicaron a la agencia Noticias Argentinas que el viernes habrá una inspección en La Bombonera para constatar si se realizaron las obras que pidió el organismo dependiente de Berni, aunque eso no afectará a la medida ya tomada.

Con respecto a River, la institución fue sancionada por no arreglar molinetes del ingreso al estadio, algo que ya había sido advertido en el partido de ida ante Boca por la Libertadores.

Como se constató que ésto no fue solucionado este domingo ante Rosario Central, el equipo dirigido por Marcelo Gallardo jugará a puertas cerradas ante Temperley, por la décimo sexta fecha, una vez que se reanude el torneo «Julio Humberto Grondona».