Por Fabrizio Turturici, desde el Coloso Marcelo Bielsa

La tarde de fútbol en el Coloso Marcelo Bielsa se presentaba como una gran oportunidad para Newell’s. Con el debut invisible de Diego Osella, que —aunque ya es el técnico— no pudo hacerse presente en el banco de suplentes debido a una suspensión pendiente, la Lepra encaraba una nueva etapa.

Sin embargo, el pueblo rojinegro, que se llegó hasta el Parque Independencia y pobló el Coloso Marcelo Bielsa, fue sorprendido a los 4 minutos de juego, con un remate de Mauricio Martínez tras desconcierto en una pelota parada, que significó el 1 a 0 para la visita.

Con este golpe inesperado, el partido se puso cuesta arriba para la Lepra. Aunque, lejos de quedarse dormida, sometió a Unión en su área y tuvo varias oportunidades para alcanzar la igualdad, inclusive con un penal no sancionado por Argañaraz.

No obstante, el equipo es uno cuando ataca y otro cuando defiende. Bajo un torbellino de confusiones y malas ubicaciones, los de Madelón complicaron en cada avance al local, amenazando con numerosas y nítidas situaciones para ampliar la cuenta.

Pisando la media hora de juego, el desarrollo de desequilibró para Newell’s. Perdió la pelota y cedió el avance de un Unión cada vez más punzante y cerca del área de D’Angelo. En este contexto, sufrió por el descalabro defensivo rojinegro, que exhibió a Domínguez totalmente desconectado y a Cáceres ratificando su falta de experiencia en la zaga central.

A la hora de lastimar, Newell’s marchaba desordenado, sin núcleo de juego y con la única referencia de Lucas Boyé, voluntarioso, que encaminaba bien casi todas las jugadas pero que no terminaba de definirlas: desperdició tres claras abajo del arco.

Pero a los 35 minutos, llegó un alivio para el Rojinegro. el mismo Boyé la guapeó y fructificó un contragolpe letal, asistiendo a Scocco para que este defina, mano a mano, con mucha categoría para la igualdad 1 a 1.

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Haciendo un balance de lo que fue el primer tiempo, resulta necesario distinguir dos caras bien marcadas. Newell’s fue calamitoso cuando tuvo que defenderse en su campo de juego; y peligroso a la hora de mirar el arco de enfrente.

Desde la vuelta del vestuario, la premisa debería haber sido corregir las fisuras defensivas. Aunque el elenco tatengue demostró, con sus aproximaciones, que Newell’s seguiría sufriendo hasta el final del cotejo. El mediocampo leproso tuvo responsabilidad por esto, ya que hizo agua siempre.

Las cartas que presentó sobre la mesa el equipo de Osella, fueron justamente las predilectas por el técnico. La vía optada fue siempre la del contragolpe, ya sea por voluntad o necesidad. Rozando el cuarto de hora, Argañaraz obvió otro penalazo para Newell’s, en una jugada en la que Zurbriggen derribó a Advíncula dentro del área chica.

El trámite se emparejó sobre la mitad del complemento. La condición física, tanto de unos como de otros, mermó y el partido cayó en una laguna. No obstante, fue la primera vez que la Lepra no corrió riesgos en su campo, ya que los de Madelón dejaron de atacar con la misma intensidad.

Ya sobre el final, Newell’s no pudo sacar diferencias y, sin embargo, obtuvo un justo empate. Aunque la primera parte había sido un aplazo, en el complemento se recompuso y terminó salvando un partido para el olvido.

La imagen del partido terminó siendo la del final, una pelota parada que peinó Formica y se estrelló en el travesaño, evitando lo que hubiera sido una victoria increíble de la Lepra. El sabor agridulce que quedaba se cortó porque, sobre el final, Insúa derribó a Soldano en el área en un claro penal no sancionado.

Newell’s no pudo sacarse diferencias con Unión y, sin embargo, obtuvo un justo empate. Aunque la primera parte había sido un aplazo, en el complemento se recompuso y terminó salvando un partido para el olvido.

Claramente, no es lo que se esperaba del equipo. No obstante, Diego Osella recién ha conducido tres prácticas. El punto en el Coloso le viene bien para trabajar con tranquilidad y comenzar una resurrección necesitada.

Síntesis

Newell’s Old Boys (1): Sebastián D’Angelo; Franco Escobar, Marcos Cáceres, Sebastián Domínguez y Emiliano Insúa; Luis Advíncula, Diego Mateo, Fabricio Formiliano y Maximiliano Rodríguez; Ignacio Scocco y Lucas Boyé. DT: Javier Osella.

Unión de Santa Fe (1): Nereo Fernández; Emanuel Brítez, Santiago Zurbriggen, Emir Faccioli y Bruno Pitton; Mauricio Martínez, Nelson Acevedo y Diego Villar; Lucas Gamba, Claudio Riaño e Ignacio Malcorra. DT: Leonardo Madelón.

Goles: PT: 4′ Mauricio Martínez (U). 35′ Ignacio Scocco (NOB).

Cambios: ST: 16′ Mugni X Escobar (NOB). 21′ Soldano X Riaño (U). 32′ Mauro Pittón X Martínez (U). 35′ Rolle X Gamba (U). 39′ Fértoli X Advíncula y 45′ Formica X Scocco (NOB)

Amonestados: Escobar, D’Angelo y Scocco (NOB), Riaño, Pittón y Villar (U)

Árbitro: Pedro Argañaraz.

Estadio: Coloso Marcelo Bielsa