Por Santiago Fraga

Así como la sensación post-clásico para Newell’s fue la de haber perdido dos puntos, el idéntico resultado logrado este sábado en La Bombonera parece mucho más dulce. Manteniéndose en su libreto, la Lepra empató 1 a 1 ante un Boca que no dio indicios de amplia superioridad y jugó con la cabeza pensando en su próximo compromiso de Copa Libertadores.

En efecto, el punto obtenido por el rojinegro resulta un «puntazo» con todas las letras, principalmente por lo complicado del rival y del escenario. Sin embargo, a la hora de analizar el desarrollo del encuentro, en realidad el premio podría haber sido incluso mayor para los de Frank Kudelka.

Claro está, el factor clave que inclinó esa balanza para el lado de Boca fue la tempranera lesión de Jerónimo Cacciabue, un jugador clave en el esquema de un mediocampo ya golpeado por la lesión anterior de Mauro Formica.

A partir de esa substitución, el centro del campo de Newell’s quedó partido, ya que el hombre encargado de reemplazarlo, Lucas Villarruel, no comparte las características del ‘aviador’. Mientras el juvenil se destaca por su entrega y la velocidad en el traslado, el ex Defensa y Justicia es un jugador más pausado y pensante.

El tanto xeneize apenas lesionado Cacciabue fue un mazazo duro para un equipo que no supo cómo reconstruirse. Así, habiendo tenido una salida desde el fondo impecable durante todo el encuentro y desarrollando un buen juego de toques, siempre sufrió para encontrar a las referencias de ataque, errando muchos pases a la hora de romper líneas.

Si bien también se puede considerar que demoró en hacer substituciones, es todo mérito de Frank Kudelka el empate leproso. Con las cartas ya mostradas, el DT decidió patear el tablero y modificar por completo el esquema, dejando cuatro referencias de ataque con el ingreso de Cristian Insaurralde (autor del empate en la primera que tocó) por Denis Rodríguez (muy errático e impreciso, otro flojo partido del volante).

Queda en el recuerdo, también, la clarísima acción dilapidada por Maxi Rodríguez en el final de la primera parte, que hubiera significado el empate transitorio y un golpe de efecto que sin dudas hubiera alterado los papeles del partido.

Como punto de ilusión para los hinchas, el equipo sigue demostrando ímpetu y un respeto por el esquema de Kudelka, aún cuando es superado o está por debajo en el marcador, ante el convencimiento de que esa vía le dará tarde o temprano resultado. Como aspecto preocupante, sigue habiendo cosas que pulir en la faceta ofensiva y además se nota muy bajo de confianza a Alan Aguerre, el gran salvador de la temporada pasada.

De esta forma, Newell’s consiguió un gran resultado y mantiene su racha de haber anotado en todas las fechas del campeonato, en detrimento del récord de imbatibilidad que portaba Esteban Andrada.

Ahora se vienen tres paradas claves para la Lepra, en las que deberá mantener el funcionamiento demostrado hasta ahora para conseguir puntos que lo alejen aún más del descenso ante rivales directos como Banfield, Patronato y Gimnasia.