Diego Osella estaría transitando sus últimas horas como entrenador de Newell’s y su posible salida tiene que ver con los pobres resultados deportivos, pero mucho más por sus declaraciones pos derrota ante Temperley que lo deja mal parado de cara a su autoridad o no para manejar al plantel.

Fue duro Osella el domingo tras el papelón. «Ellos se tiraban de cabeza y nosotros mirábamos», «después del Clásico la sensación que tengo es que jugamos cuando queremos», o «el fútbol es otra cosa, intensidad, ganas de defender a una camiseta», fueron sus frases más picantes y en caliente.

Y si bien estas declaraciones no cayeron mal en el hincha, que en gran parte coincidió con el DT, sin dudas lo puso en un lugar distante del grupo, el mismo que en gran mayoría seguirá en el Parque tras el receso.

Osella sabe que sus palabras y los pobres resultados lo dejan con un pie fuera del Parque. Y hoy las tres o cuatro agrupaciones que lo tenían en carpeta para sobrellevar el próximo semestre, ya no piensan igual. Ya no tiene banca.

Tal vez por eso intentó dar un mensaje distinto el lunes, donde elogió a los referentes y se autoculpó por este realidad. Pero fue tarde. Ese manotazo de ahogado incluso cayó mal en algunos hinchas que bancaron sus palabras pos Temperley. Y así, frente a los tucumanos puede ser su despedida. Aunque en este Newell’s ninguna verdad es absoluta.