Los clubes de la primera división del fútbol argentino deberán respetar los requisitos que la organización de la Superliga impondrá a partir de abril, pero que se implementarán desde la próxima temporada.

En este sentido, los equipos no podrán incorporar jugadores en caso de tener deudas, algo que ya se viene evaluando desde hace tiempo. Por eso, a partir del 1º de abril y hasta el 30 de junio, los clubes podrán iniciar el trámite para conseguir su licencia.

Otras de las exigencias de la Superliga, y que están avaladas por la AFA, tienen que ver con cuestiones organizativas e internas de cada club, como una buena profesionalización en sus estamentos.

En cuanto a la organización, se pretende que los clubes tengan mejores recursos en diferentes aspectos como seguridad, prensa, marketing, operaciones y dirección deportiva, y también que los cuidados médicos se den tanto en el fútbol profesional como juvenil.

Además, será obligatorio que los clubes cumplan con el Reglamento de Prevención contra la Violencia en Espectáculos Deportivos.

El proyecto que la Superliga quiere comenzar a implementar luego del Mundial de Rusia, incluye además la creación de Órganos de Control para lo económico-financiero y la infraestructura para realizar un seguimiento sobre los temas contables mensuales y los pedidos de modificaciones en instalaciones y predios.

Si los clubes no cumplen con los pedidos y exigencias de la Superliga recibirán sanciones que pueden ser: multas, quita de puntos, partidos a puertas cerradas, inhabilitación de estadio, prohibición de inscribir jugadores y suspensión o quita de la licencia.

Más adelante, la idea de los directivos de la Superliga, además del regreso de los hinchas visitantes, es que aquellos clubes que no puedan completar -en los partidos- el 75 por ciento de la capacidad de su estadio, recibirán multas, como se realiza en la Liga Española.