El Fútbol Club Barcelona puede perder hasta 137 millones de euros por el impacto negativo de la marcha del astro argentino Lionel Messi y reducir en un 11 por ciento su actual valoración de negocios, estimó hoy la consultora Brand Finance.

Del volumen total de pérdidas, unos 77 millones correspondería a la baja de contratos comerciales y otros 43 a la disminución en la venta de camiseta y otros productos de mercado, precisa el informe reproducido por el diario Sport.

Un tercer concepto en reducción serían los ingresos por día de partido, cuya caída se proyectó en 17 millones. Según este informe, Barcelona es la segunda marca más valiosa del mundo del fútbol (1.266 millones), solo superada por Real Madrid (1.276).

La queja de los socios

Un grupo de socios del Barsa presentó una carta de queja para impedir la posible contratación de Lionel Messi por parte del Paris Saint-Germain de Francia, lo que parece inminente según las versiones que circulan en Europa.

«En nombre de socios del Barcelona, mi bufete ha preparado una queja ante la Comisión Europea y demandas de suspensión provisional ante justicia civil y administrativa en Francia para impedir que PSG firme a Lionel Messi», señaló el abogado Juan Branco.

Según el letrado «los ratios del PSG en términos de fair play financiero son peores que los del FC Barcelona. En el 2019-20, el ratio entre salarios y ingresos del PSG fue del 99%, mientras el del Barcelona fue del 54%. Entre tanto, la diferencia se ha incrementado».

El estudio jurídico considera que «es inconcebible que el fair play financiero sirva para agravar las derivas del fútbol-business y las desvirtuación de las competiciones. Pediremos a las autoridades que intervengan inmediatamente con el fin de bloquear esta operación que lesa los intereses patrimoniales de nuestros representados».

El París Saint Germain contrató para esta temporada a Sergio Ramos, Gianluigi Donnarumma y Georginio Wijanldum, todos jugadores libres, además de lograr la compra del marroquí Achraf Hakimi, que costó 60 millones, y la renovación del contrato de Neymar hasta 2025, provocando un incremento notable de la masa salarial.

Locura en Francia

Mientras tanto, el astro argentino Lionel Messi continuaba esta tarde en su casa de Barcelona, mientras los fanáticos del PSG aguardan con locura su posible llegada, haciendo guardia tanto en el aeropuerto como en el estadio Parque de los Príncipes.

Lio se dejó ver hoy en su domicilio del barrio exclusivo de Bellamar, municipio de Casteldefels, según reportaron cronistas apostados en ese lugar. Allí se encuentra junto a Luis Suárez, su ex compañero y amigo que juega en Atlético Madrid.

La ansiedad por recibir al argentino en la capital francesa provocó hoy que cientos de hinchas se trasladaran al aeropuerto privado de Bourget y también al ingreso del estadio del PSG, situado al oeste de la ciudad, aunque su traslado no fue confirmado.

En lo salarial hay aprobación para firmar un vínculo por tres años a cambio de 120 millones de euros, pero el astro plantea distintas cuestiones que están en discusión y todavía impiden el anuncio del fichae más trascedente de la historia moderna.

Leo desea, entre otras cosas, libertad para regresar a la ciudad de Barcelona cuando quiera -cumpliendo la rutina de partidos y entrenamientos con PSG-, el derecho a rescindir de manera unilateral y carta libre para sumarse al seleccionado argentino en todos los compromisos, sean oficiales o amistosos.

Según Florent Torchut, periodista de la prestigiosa revista France Football, el argentino no ve con malos ojos «postergar» la definición de su futuro para elegir la mejor opción que se adapte a todos sus intereses, por lo que se genera una fuerte expectativa.