El diluvio que cayó este sábado en la provincia de Buenos Aires hace peligrar la jugabilidad del Superclásico, dado que Boca y River tenían pactado enfrentarse por la final de ida de la Copa Libertadores, desde las 17 en La Bombonera.

Autoridades de la Conmebol inspeccionarán este mediodía la cancha para examinar el estado del campo de juego y tomar la decisión de si se disputará el partido, el primero de los dos que se definirán el próximo 24 en el Monumental.

Según informaron a NA desde la entidad que rige los destinos del fútbol sudamericano, los veedores estarán a las 13 en la cancha y, luego de recorrerla, definirán los pasos a seguir. Vale destacar que la cancha está inundada y esperan que drene.

Más allá de las especulaciones, por ahora, el partido que todos esperan se jugará sin problemas.