Por Enrique Genovar

Se terminaron las especulaciones. Un receso que se hizo eterno. Una pretemporada que estuvo marcada por un buen trabajo en Arroyo Seco, por la ida de Walter Montoya y por la adaptación de un nuevo cuerpo técnico. Al final de la misma el equipo comenzó a mostrar las ideas del entrenador y en las últimas semanas los hinchas recibieron el mejor regalo de este tiempo sin fútbol: la vuelta de Javier Pinola.

La pelota vuelve a rodar y con ella las ilusiones se refuerzan. Claro que no será sencillo el arranque, no por el rival, sino porque a partir de ahora el Canalla dejará atrás dos años muy intensos donde fue protagonista casi en todo lo que disputó.

El presente, a priori, no asoma como seductor. Ya que desde el inicio el Central de Montero estará dedicado a sumar puntos para salir de la zona en la que está. Pero la 22ª posición aparece como mentirosa desde los números. Porque con un par de buenos resultados en fila al Canalla le será fácil subir en la clasificación. Sin dudas lo más cuesta arriba será reemplazar a Lo Celso, al Chaqueño y la que Montero pueda seducir desde su idea.

Depende de los protagonistas, los hinchas apoyarán como siempre y llenarán el Gigante para ver el primer paso de un equipo que tendrá la obligación de reinventarse tras dos muy temporadas. ¡Chau especulaciones, hola ilusión!