En su tarea por reconstruir al Barcelona luego del fracaso de la Champions League, el flamante entrenador holandés Ronald Koeman descartó al delantero uruguayo Luis Suárez, en tanto que dio por seguro contar con el astro argentino Lionel Messi.

A pesar de los rumores de salida, el ex futbolista blaugrana que fue confirmado como reemplazante de Enrique Setién en el banquillo de la institución, consideró que la Pulga «con su calidad, encontrará el espacio en la evolución del equipo».

«Es un placer tener un jugador como Messi en el equipo», aseguró Koeman, quien la semana pasada mantuvo una reunión con el rosarino tras la cual, según los medios locales, éste le comunicó que se veía «más afuera que adentro» del nuevo proyecto.

Sin embargo, el que ya está excluido del nuevo ciclo que se viene en Barcelona es su gran amigo el Pistolero Suárez, que recibió un llamado telefónico del ex entrenador de los Países Bajos para aclararle que no entraba en sus planes futbolísticos.

El goleador charrúa ganó 13 títulos con la camiseta del Barsa, logros que incluyen una Champions League, un Mundial de Clubes, una Supercopa de Europa, cuatro ligas españolas, cuatro Copas del Rey y dos Supercopas de España.

La dolorosa eliminación de la competencia europea con el ya histórico 8-2 en contra ante el campeón alemán Bayern Múnich detonó la vida futbolística e institucional del club catalán, que incluso hasta podría perder a su emblema Lionel Messi.