Por Santiago A. Fraga

Una vez más con Iván Gómez como la brújula del mediocampo y con un Lucas Hoyos de salvadas determinantes, Newell’s Old Boys consiguió un triunfazo ante su gente para mantener el puntaje ideal en la Copa Sudamericana y quedar parado de la mejor forma para la recta final de la fase de grupos, con el 1º puesto como el gran objetivo a conseguir en este semestre.

A pesar de haber sufrido una vez más uno de los problemas más recurrentes en todo el ciclo Heinze, que es la falta de alternativas para traducir en jugadas de riesgo su marcada tenencia de pelota, el 1 a 0 de esta noche sirve para dar respiro y tiempo a un equipo que aunque se nota trabajado termina peleando contra sus limitaciones semana a semana.

Con un equipo limitado por las lesiones de algunos de sus jugadores determinantes como Víctor Velázquez y Armando Méndez, Gabriel Heinze debió optar obligadamente por el esquema 4-3-3, incluyendo a Guillermo Ortíz como marcador central derecho y quedando sin centrales ni lateral diestro en el banco de suplentes.

Asimismo, metió mano también en el aspecto ofensivo y dio salida a jugadores como Cristian Ferreira y Ramiro Sordo, de bajos rendimientos, para apostar por Marcos Portillo y Jeremías Pérez Tica.

Contra un Santos que siempre priorizó el quedar bien parado defensivamente, a Newell’s le costó poder encontrar momentos de superioridad numérica en ataque, viéndose por momentos encerrado y con los disparos lejanos como la única alternativa para intentar generar algo de peligro.

La presencia de Gómez en el mediocampo (acelerado por momentos, pero con un despliegue infernal) fue la más determinante, tanto para la recuperación como para el inicio de ataques rápidos de la ‘Lepra’ y hasta para pisar el área rival, mientras que a Brian Aguirre y a Portillo les costó poder encontrar espacios y compañeros libres para dar el toque de calidad necesario en el último tercio.

Junto al ‘7’ leproso, la otra figura de la noche fue Hoyos, quien en el primer tiempo se quedó con un mano a mano peligrosísimo del colombiano John Mendoza, en un contragolpe generado por un mal pase de Willer Ditta, y en la segunda parte volvería a ser decisivo.

Dicha jugada del primer tiempo tuvo su anuncio en acciones anteriores, y es que desde el inicio Ortíz se posicionó para la salida mucho más lejos del zaguero colombiano que la distancia que se habitúa con Facundo Mansilla o Velázquez, por lo que el rojinegro quedó constantemente propenso a cometer errores ante la presión de los cuatro hombres de ataque del Santos.

En general, en el primer tiempo Newell’s fue quien tuvo la pelota, pero jamás pudo lastimar a su rival; no así Santos, que si bien tuvo entre 5  y 10 minutos de intensidad, sí pudo valerse para generar dos ocasiones de sumo riesgo: el mencionado mano a mano y una pelota parada en la que un remate de Mendoza pasó muy cerca del palo derecho.

Con el ‘Peixe’ saliendo con mayor decisión en los primeros minutos del complemento, y teniendo rápidamente una clara que pasó muy cerca del palo, después de un enorme bache, la primera ocasión de riesgo de la ‘Lepra’ en el partido llegaría recién a los 27’ de esa segunda parte, con un remate de Marcos Portillo desde la puerta del área que salvó de gran manera el arquero Joao Paulo.

Aún así, inmediatamente, tres minutos después, Santos volvió a tener una oportunidad de oro para ponerse arriba: cabezazo de Rodrigo Fernández que salvó estupendamente Hoyos y un yerro insólito de Lucas Braga en el rebote con el arquero vencido.

Los fantasmas de partidos pasados, con Newell’s con un abrumador porcentaje de tenencia pero muchísimos problemas para traducirlo en tiros al arco, volvían a acechar en la noche rosarina, hasta que terminó apareciendo el tan nombrado Gómez para salvar la ropa del rojinegro, tapar las falencias y darle una inmensa alegría a su público.

Con una verdadera corajeada, tras un centro incómodo de Pablo Pérez, el volante terminó pisando el área para primero corregir la dirección con la cabeza, y luego para aprovechar el rebote en el hombro de Recalde para definir con astucia y rapidez ante el achique de Joao Paulo, poniendo el 1 a 0 definitivo.

Quedarán para otro día las líneas y líneas sobre la enorme falta de gol de la ofensiva rojinegra (con 11 jugadores utilizados entre extremos y centroatacantes en lo que va del año y sin hallarse aún la fórmula) y los problemas del entrenador para encontrarle la vuelta a traducir esa posesión bien trabajada y lograda en jugadas de riesgo real para los arqueros rivales.

Hoy, la ‘Lepra’ se dará el gusto de gozar de un triunfo que además de ser necesario por los últimos sinsabores de local (ante River y Argentinos) es sumamente fundamental para los destinos del equipo en la Copa Sudamericana, ya que con este resultado Newell’s mantiene puntaje ideal y puede aspirar seriamente a lograr el 1º puesto, que además de la clasificación le significaría no tener que cruzarse en primera instancia con uno de los equipos relegados de la Libertadores (entre los que hoy, por ejemplo, se encuentran River, Corinthians o Libertad).

Ganar su último compromiso de local ante Audax Italiano o sumar algún punto en Bolivia y Brasil ya significarían el último y necesario paso para conseguir el pase a octavos de final, a la espera del resultado entre el equipo chileno y Blooming que completará esta tercera jornada.