Gabriel Omar Batistuta cumple 50 años y el mundo del fútbol, lo recuerda como uno de los grandes atacantes de la historia del deporte. Bati nació un 1º de febrero de 1969 en Reconquista, al norte de Santa Fe y con 356 goles (entre clubes y selección nacional), quedó inmortalizado para siempre.

Batistuta llegó a Newell’s en 1987, en la época dorada de las inferiores Rojinegras de Griffa y Bielsa, y rápidamente saltó a primera división, donde anotó 10 goles.

Después de un breve paso por River (con 4 tantos), Batigol arribó a Boca, donde pegó un gran salto, conquistando 19 goles en 1991. En aquel equipo, formó una gran dupla con Diego Latorre.

El Batigol pasó del Xeneize a Fiorentina, su casa en Europa. En el club italiano estuvo siete temporadas, donde sacudió la red en 207 oportunidades, y donde consiguió varios títulos italianos. Luego estuvo en la Roma e Inter.

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A partir de 1991, Gabriel Batistuta comenzó su romance con la selección argentina, donde convirtió 56 goles y obtuvo dos Copas América (1991 y 1993), de la mano de Alfio Basile.

Bati terminó su carrera profesional en el Al-Arabi de Catar en el 2005 y luego, tuvo un breve paso como jugador de polo.

Gabriel Batistuta es todo un símbolo de una época del fútbol argentino, donde los pibes dejaban todo por cumplir su sueño: llegar a primera división para después jugar en Europa. Entre los más grandes goleadores de la Albiceleste, Batigol quedará para siempre en la memoria colectiva del futbolero argentino.