La justicia paraguaya allanó hoy las dependencias de la sede de la Conmebol (Confederación Sudamericana de Fútbol) en Asunción, en el marco de la investigación sobre supuestos hechos de corrupción que llevan adelante las autoridades de los Estados Unidos.
Hernán Galeano, agente fiscal especializado en lavado de dinero, encabezó el procedimiento en busca de documentación relacionada a concesiones de derechos comerciales y de difusión para eventos deportivos.
El allanamiento se realizó con orden del juez penal de garantías José Agustín Delmás y con el apoyo de la delegación de delitos económicos de la policía local.
Peritos informáticos participaron del operativo con el fin de copiar los discos duros de las computadoras de la entidad, según informó un despacho de la agencia alemana de noticias DPA.
«Es un procedimiento de allanamiento con autorización judicial, de una asistencia jurídica en materia penal solicitada por el Departamento de Justicia de los Estados Unidos, en el marco de la causa seguida a los dirigentes de la Conmebol sobre lavado de dinero y otros hechos punibles, conforme a la legislación penal de los Estados Unidos», explicó el fiscal Galeano.
El funcionario judicial añadió que «se llevó adelante todo el trámite. Se procedió al registro de todas las dependencias, principalmente tesorería, presidencia, la parte administrativa, secretaría general y finanzas».
Hasta que estalló el escándalo de la FIFA en mayo del 2015, la sede de la Conmebol poseía estatus de embajada, por lo que la justicia local no tenía competencia en el edificio.
Sin embargo, el Congreso paraguayo modificó la legislación y la justicia pudo acceder a la documentación de las dependencias del ente rector del fútbol sudamericano.
Ninguna región se vio tan afectada por el FIFA-Gate como Sudamérica, arrasada como nunca por los escándalos que salpican al fútbol internacional.
Entre la primera arremetida judicial de fines de mayo y la segunda de principio de diciembre del año pasado, son 20 los directivos o empresarios sudamericanos que están detenidos por esta causa, como así también prófugos y con pedidos de extradición de los Estados Unidos.
Entre ellos están los últimos tres presidentes de la Conmebol: Nicolás Leoz, Eugenio Figueredo y Juan Ángel Napout, así como importantes directivos de cada una de las diez federaciones miembro.
