Atlético Nacional de Medellín derrotó a Independiente del Valle por 1 a 0 y se consagró por segunda vez en su historia, campeón de la Copa Libertadores de América.
El único tanto del partido, lo convirtió Miguel Borja, a los 8 minutos del primer tiempo, con una exquisita definición.
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El elenco Cafetero, dirigido por Héctor Rueda, demostró a lo largo del certamen continental, un gran rendimiento colectivo, con pasajes de buen fútbol.
Los colombianos, superaron a Central en cuartos de final, en el partido más duro del camino hacia el título. Resolviendo la serie, en un segundo tiempo emotivo.
Los Verdes de Medellín, pasaron la primera fase cómodamente, producto de cinco victorias y empate, con 12 goles a favor y la valla del casildense Armani, invicta.
En octavos de final superó a Huracán, con un polémico arbitraje de José Argote en Colombia, que perjudicó al Globo. En semifinales, eliminó al difícil San Pablo de Bauza y llegó merecidamente al partido decisivo.
Con las excluyentes actuaciones de Marlos Moreno, Alejandro Guerra (que por primera un venezolano consigue el título), Alexander Mejía y Miguel Borja, que le impusieron un estilo de juego muy aceitado.
