El último que cierre la puerta. El Atlético de Madrid decidió hoy retirarse del proyecto de la Superliga Europea, anunciado el domingo pasado por doce de los clubes más poderosos, con lo cual suman siete ya las bajas de una propuesta que quedó trunca en las últimas horas.

Ante las amenazas de la FIFA y la UEFA, el Colchonero, uno de los tres equipos de La Liga de España en haberse sumado, explicó que «para el club es esencial la concordia entre todos los colectivos que integran la familia rojiblanca, especialmente nuestros aficionados».

El plantel del Aleti y su entrenador argentino Diego Simeone «han mostrado su satisfacción por la decisión del club, al entender que los méritos deportivos deben primar por encima de cualquier otro criterio”, indicó el texto difundido por el club madrileño.

Esta noticia se suma a la que ayer dieron los clubes ingleses, que se bajaron ante la presión del arco deportivo e institucional del mundo entero, sobre todo por el hecho de prohibir a los jugadores participantes de jugar el Mundial con sus selecciones.

Las críticas contra la Superliga excedieron inclusive el ámbito del fútbol, cuando el propio papa Francisco expresó su rechazo, mientras los hinchas del Chelsea protestaban en la calle al paso del micro que transportaba a su propio plantel en Premier League.

Manchester City fue el primero de «los 12» en hacer oficial su salida y pocas horas después se sumaron los otros cinco ingleses: United, Arsenal, Liverpool, Tottenham y Chelsea. Todavía resta conocer la decisión de los tres italianos (Juventus, Inter y Milan) y de los españoles Real Madrid y Barcelona, aunque el proyecto ya haya quedado desmantelado.

En el caso del club merengue, queda la incómoda posición de que su propio presidente Florentino Pérez iba a ser el mandatario de una Superliga que no arrancó, por lo que no estará bien visto cuando participe de las competencias de la UEFA.