El primer gran partido de fútbol del año fue una victoria agónica por 2 a 1 del Manchester City, campeón y líder de la Premier League de Inglaterra, en casa del Arsenal que tuvo un amplio dominio pero en dos minutos, cometieron un penal, erraron un gol insólito y se quedaron con uno menos para luego perderlo sobre el cierre.

Los Gunners fueron claramente superiores durante la primera parte pero le hicieron precio a los Ciudadanos, ya que solo pudieron anotar el gol de Bukayo Saka sobre la media hora de juego. Sin embargo ya en la segunda parte, el dominio se les escapó en un lapso de apenas dos minutos y ya nada fue lo mismo.

Es que en ese tiempo el Arsenal cometió un penal que el argelino Riyad Mahrez cambió por gol sobre los 57, se perdieron un gol con el arco libre en los pies del brasileño Gabriel Martinelli y enseguida su compatriota Gabriel fue expulsado por doble tarjeta amarilla.

A pesar de que el City de Guardiola lo sometió en su campo por el resto del partido, no encontraba las herramientas para superarlo hasta que a los 93 apareció el español Rodri, con una sutil definición en cuyo festejo terminó sacándose la camiseta y viendo la amarilla.

Con este nuevo éxito, el City de Pep Guardiola alcanza los 53 puntos y estira la brecha con sus perseguidores, que son Chelsea (42) y Liverpool (41), mientras que Arsenal se quedó con las manos vacías para mantenerse en la cuarta posición con 35 unidades cosechadas.

En la continuidad de la jornada de Año Nuevo, el fútbol inglés que es el único que hoy tendrá acción, al menos de las ligas importantes, tendrá a Watford contra Tottenham a partir del mediodía argentino y Crystal Palace ante West Ham a partir de las 14.30 por ESPN.