El último adiós, desde adentro: Conclusión está en la Ciudad de Buenos Aires donde una multitud despide al astro argentino Diego Armando Maradona, cuyos restos fueron velados en la Casa Rosada y una fila de más de treinta cuadras llegó a aguardar por entrar.

Luego se sucedieron diversos incidentes y, tras algunos desbordes en el ingreso, la familia decidió dar por finalizada la ceremonia.

La aglomeración de personas, calculada en aproximadamente un millón, espera en una cola que avanza lento pero sin detenerse y que se extiende desde la Casa de Gobierno hasta la avenida 9 de Julio, en una movilización histórica para homenajear su figura.

Mientras el centro de la plaza está completamente reservado para los periodistas, teniendo en cuenta que hay prensa internacional y más de 800 acreditados para la cobertura del evento, sumado a coordinadores, Cruz Roja y los efectivos policiales.

El mito viviente que fue Maradona, fallecido ayer a los 60 años de edad a causa de una insuficiencia cardíaca aguda, se refleja en el sentir de un pueblo que hoy se mueve para devolverle al ex campeón del mundo todo lo que él dio por ellos.