Por Pablo Martínez

Central no se achicó en su visita a Chile, a pesar de jugar con un hombre menos en casi todo el partido, nunca renunció a su propuesta ofensiva y con un gran desgaste físico alcanzó un merecido empate que lo ilusiona para pelear la clasificación a la próxima fase de la Sudamericana.

La temprana expulsión de Martínez Dupuy parecía que lo iba a condicionar al elenco del Kily, pero no fue así porque los rosarinos apostaron al ataque frenético de los últimos partidos, resignando espacios para la contra.

En el complemento, había una clara predisposición del Canalla para buscar la igualdad y la consiguió con el cabezazo de Diego Zabala, que junto con Gamba, dieron todo para conseguir el objetivo final.

Es cierto que en el final, la cuestión física le pasó factura a Central y en ese momento apareció Jorge Broun que se agigantó en el arco centralista y en un par de ocasiones, evitó la caída de su arco.

El Canalla rescató un punto positivo, no sólo desde lo numérico sino también en cuanto al juego, porque a pesar de la adversidad puso coraje y no dio nunca el partido por perdido, de tanto buscar llegó al gol que lo invita a soñar con la clasificación.

El equipo del Kily González sigue manteniendo el nivel de juego, que desde el triunfo con San Lorenzo hasta aquí parece no claudicar, presión alto, juego rápido y preciso en ofensiva y seguridad en lo defensivo. Un planteo que invita a soñar al hincha en todos los frentes, el domingo estará atento al choque con Platense para buscar la clasificación en la Copa de la Liga.