Por Santiago Fraga

En momentos donde prima la necesidad de sumar puntos, hacerse fuerte de local es vital para cualquier ambición que un club pueda tener. A este Newell’s todavía le falta bastante para ser un equipo que le haga sentir el peso de la localía a sus rivales, pero sabe cuándo está en la cuerda floja y que ahí cualquier triunfo da vida.

La Lepra de Juan Manuel Llop se impuso con un leve merecimiento este mediodía, en un horario atípico, por 2 a 1 sobre Chacarita, que es uno de los equipos más flojos del torneo y los dos puntos que suma en la tabla lo demuestran.

Apuntando al desarrollo del juego, el primer tiempo fue la clave para desbloquear todo el compromiso. En un partido trabado, donde pasaba muy poco y parecía que estaba más para la siesta que para el fútbol, fue Braian Rivero quien despertó a todos con un pase magistral en diagonal desde el centro del campo que terminó dejando mano a mano a Brian Sarmiento. Un toque sutil del 10 leproso bastó para vencer a Pedro Fernández y permitirle a él conseguir ese grito que tanto ansiaba, el sueño de su vida, y el desahogo de meses de lesiones, de críticas y de que las cosas no salieran.

Fue a partir de ese gol que Newell’s creció en contundencia y también en juego, siendo destacable una jugada con más de siete toques en velocidad, coordinada por Víctor Figueroa, que terminó con un centro de Sarmiento y un cabezazo de Leal que tapó el guardavalla funebrero. Dos minutos más tarde, desde un córner, otro de los refuerzos leprosos haría su estreno en las redes: Bruno Bianchi, con un gran cabezazo de los que acostumbraba en Atlético Tucumán.

Sin embargo, como se acerca Halloween y tenía que haber algún susto, el segundo tiempo mostró una cara completamente distinta para el rojinegro. Después de unos primeros diez minutos donde daba a entender que lo podía liquidar, con tres acciones en donde Luís Leal quedó mano a mano y no pudo vencer al arquero, la Lepra comenzó a especular y dejó avanzar a su rival, que a los tumbos y sin muchas ideas consiguió llegar en demasía al área leprosa.

Sobre los 37 del complemento aparecería Juan Álvarez Morinigo, que en uno de los miles de sablazos que le tiraron a Pocrnjic, de buena actuación, consiguió el descuento de Chaca e instalar el terror de que un empate era posible.

La salida de Brian Sarmiento por Juan Ignacio Sills fue una clara demostración de lo que el técnico leproso pensó para los últimos minutos del equipo, y un concierto de errores defensivos y en las salidas consiguió sacar de quicio a más de un hincha en el Coloso Marcelo Bielsa.

En líneas generales, Newell’s aprovechó los momentos de lucidez que tuvo. Se nota en el campo de juego que es un equipo que todavía busca su rumbo y no está cerca de consolidarse, pero tres puntos son tres puntos y son los que dan más aire para poder pensar mejor qué cambios realizar en la semana. Nehuen Paz fue uno de los que más firme estuvo en defensa, mientras que Leonel Ferroni demostró ser cumplidor y que tiene cosas para pelearle el puesto a Milton Valenzuela.

Newell’s venció a Chacarita por 2-1, en un final emocionante