Por José Odisio
Chau receso. El fastidio se fue disipando. Los problemas económicos no desaparecieron, pero por un rato se olvidan. La ilusión deja atrás el enojo. La pelota rueda y la Lepra sueña. Y el primer paso será Defensa y Justicia, aunque habrá otro rival: La búsqueda de ser aquel de fines del año pasado.
No estará Formiliano, sí estará Scocco. Ya Mateo se retiró y Sills deberá reemplazarlo futbolísticamente para que nadie extrañe lo otro que aportaba Pomelo, la entrega a pleno durante noventa minutos.
La idea sigue siendo la misma. Formica es el eje del juego y muestra un nivel muy alto. Hoy es el jugador clave. Quignon es socio en el armado y también aporta en el quite. Y Nacho es el gol. Maxi siempre es Maxi. Y Amoroso corre por él y sus compañeros. Y atrás, si Moiraghi mantiene su nivel, los problemas no serán terminales.
Todo está listo. Newell’s tiene puntos para aspirar a más que entrar a una Copa. Y un plantel más que interesante. Hay convicción. Pero desde adentro no se quieren crear falsas expectativas. Ser punto es más cómodo. Pero el hincha quiere ser banca. Y no le molesta ser puntero.
