El mediocampista Ricardo Centurión le metió presión al San Pablo, dueño de su pase, para que acepte que continúe su carrera en Boca Juniors.

«Si no sigo en Boca, me retiro», dijo el futbolista en una entrevista concedida a TyC Sports.

Centurión estaba a préstamo en la institución argentina, pero como la opción de compra es de seis millones de dólares, su continuidad parece complicada pese a los deseos de Guillermo Barros Schelotto.

En ese sentido, el entrenador le pidió a la dirigencia que el jugador continúe, aunque el San Pablo ya anticipó que no estaba dispuesto a dejarlo nuevamente a préstamo, tal como pretende el presidente Daniel Angelici.

Consultado por sus problemas fuera de la cancha, fue autocrítico: «He fallado y me he fallado a mí mismo. Estar en un club grande como Boca repercute. Quizás sentí un poco de culpa por haberle fallado a mis compañeros y al entrenador, más allá que rendí dentro de la cancha».

En ese sentido, el jugador reiteró que «el deseo es quedarme en Boca más allá que no depende de mí y por eso trato de no volverme loco».

«Guillermo es muy importante en mi carrera en Boca. Me puso contento y me emocionó que me diga que podía ser ídolo de Boca. Llevar la 10 y jugar en Boca no es nada fácil», expresó.

Centurión opinó que «el mejor del campeón fue (Darío) Benedetto porque al principio fue resistido, trabajó duro, se le abrió el arco y terminó siendo la figura».

En tanto, se mostró «contento» por el interés de Jorge Sampaoli de citarlo para la selección Argentina local y le abrió las puertas a Carlos Tevez ante un posible regreso: «Todos sabemos lo que significa, es un ídolo y va a ser bienvenido si regresa».

Por último, se quejó de las críticas mal intencionadas que le tocó sufrir por episodios fuera de la cancha: «Han llegado a decir que me dio un doping… Después, el que tiene que bancarse que le digan ‘negro drogadicto’ soy yo».