Pocas son, hasta ahora, las satisfacciones que tuvo Rosario Central en este libro de pases. A pesar de la fervorosa avocación de los dirigentes en renovaciones y extensiones de contratos, los resultados se le han negado en lo que va del mercado.

Aunque nadie duda que la mayoría de las negociaciones terminen siendo productivas, ahora hay varios contratiempos que resolver. Y aquí aparece el nombre de Nery Domínguez, mediocampista canalla que amenaza con dar el salto y cambiar de rumbo desde hace tiempo.

Las diferencias económicas entre las partes suelen ser carta común cada vez que se abre el libro de pases. Porque si bien es cierto que Domínguez es un jugador relativamente «caro» para Central, que por su calidad no le faltan ofertas desde el exterior, su representante reanima el fuego y complica la situación siempre que llega la hora de negociar en los escritorios.

Aunque en este caso, según desnudó El Ciudadano, quien no está contento es el propio jugador, ya que considera insuficiente la nueva oferta presentada por la comisión directiva. Asimismo, desde la otra parte anuncian que el ofrecimiento es cuantioso y significativo.

A Nery Domínguez le quedan seis meses más de contrato; por eso la desesperación de la dirigencia en cerrar el asunto y pasar a otra cosa. Con la tarea del armado de un equipo competitivo para la triple competencia que tiene por delante, se torna necesaria la continuidad del volante.

Por ahora, los acercamientos entre las partes no rindieron sus frutos. Aunque la historia indica que siempre que se complicó la permanencia de Nery Domínguez, hubo voluntad para solucionarlo, ajustar diferencias y garantizar que el número ’23’ de la camiseta auriazul siga teniendo dueño.