Decir que Central menospreció la Copa Santa Fe no es ninguna novedad. Es que, mientras todos dispusieron de sus titulares para los encuentros de esta competencia provincial, una buena oportunidad para ir probando el equipo de cara al debut oficial, los canallas optaron por los pibes y cayeron por 2-1 ante Colón en su propia cancha, quedando eliminados en cuartos de final con un global de 2-3.

Aunque estos chicos son los mismos que se quedaron con la pasada edición de la Copa, en aquel recordado equipo de Leo Fernández, que le valió su oportunidad de dirigir más tarde al primer equipo de Central, el rodaje era otro. Ahora la prueba de fuego fue para Cristian González y terminó «quemado» al no poder competirle de igual a igual a los experimentados sabaleros.

Dicho esto, cabe ahora poner el foco en los últimos noventa minutos del Canalla en el certamen santafesino. Y la verdad es que nunca consiguió solidez defensiva ni creatividad ofensiva, pese a contar con un mediocampo dotado de mucho juego y poca creatividad.

El partido comenzó con buen ritmo para el elenco auriazul, que tuvo movimientos interesantes en su faceta ofensiva, aunque a la hora del retroceso sufría siempre. El error estuvo desde los planes, al no disponer de un volante de quite, pero tampoco se hizo nada para solucionarlo cuando el barco se hundía.

Con el correr de los minutos, el desarrollo de juego se fue desinflando como un globo, al punto de que dejó de generar peligro en campo contrario y cedió pelota y terreno a su rival. La recuperación parecía una ardua tarea y la sorpresa en los últimos metros brillaba por su ausencia, hecho que significó la mejoría de Colón hacia finales de la primera parte.

La supremacía rojinegra se tradujo en el resultado justo antes del entretiempo, cuando Tomás Sandoval convirtió desde los doce pasos tras una mano de Recalde. El desafío de revertir el resultado para seguir con vida en el certamen provincial era grande, pero el técnico optó por no realizar modificaciones en el esquema inicial. Y lo que andaba mal, siguió andando mal.

Ni los ingresos de Rafael Sangiovani, Matías Palavecino y Christian Ebere -en lugar de Pilone, Rivas y Becker- pudieron cambiarle la pálida imagen a un Central sometido por su contrincante en el campo de juego.

El gol agónico de Marcelo Estigarribia, ante una defensa totalmente desarmada, le dio el broche final de la eliminación. Y de poco sirvió el descuento de Pereyra, uno de los puntos altos del partido por empuje más que precisión. De esta manera, los pibes se quedaron con las ganas de soñar con el bicampeonato.

Síntesis

Rosario Central (1): Marcelo Miño; Iván Antúnez, Nicolás Giménez, Luciano Recalde y Elías Gómez; Leonel Rivas, Malcom Pilone, Joaquín Pereyra y Diego Becker; Agustín Maziero y Agustín Coscia. DT: Cristian González.

Colón (2): Ignacio Chicco; Axel Vigo, Erik Godoy, Franco Quiroz y Clemente Rodríguez; Mariano González, Tomás Moschión, Marcelo Estigarribia y Braian Galván; Tomás Sandoval y Juan Zurbriggen. DT: Eduardo Domínguez.

Goles: 45′ Tomás Sandoval y 85′ Marcelo Estigarribia (C). 90′ Joaquín Pereyra (RC).

Estadio: Gigante de Arroyito.

Árbitro: Pablo Díaz.

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