Feliz. Así estaba Ezequiel Capellano. El marplatense puso a Argentina dentro del medallero en el Campeonato Mundial de patinaje de velocidad y sus lágrimas en la vuelta de descanso tras la finalización lo decían todo.

“Estoy muy contento. La carrera fue muy dura, muy áspera y la verdad que estaba planteado para tratar de ir a pelear adelante, pero se complicó un poco aunque por suerte pude ir subiendo de a poco y lograr la medalla”, comentó Capellano en la zona mixta aún con los patines puestos. Y agregó: “Pude tener paciencia y esperar un poco a las últimas vueltas, lástima que se cortaron los franceses adelante pero estoy muy feliz por lograr la medalla”.

El aliento del público presente en el patinódromo “Roberto Tagliabué” fue fundamental para darle más energías al patinador marplatense. “La verdad que la gente se está portando de diez y muy bien con todos nosotros, así que estamos muy agradecidos a todos por todo el apoyo”, expresó.

Capellano no se olvidó de los agradecimientos tras haber conseguido la medalla: “Agradecer a la Confederación Argentina de Patín (CAP), a la Municipalidad de Rosario que hizo un estadio espectacular de primer mundo, al ENARD y a la Secretaria de Deportes”.