Por Enrique Genovar

La imagen que dejó Central frente a San Lorenzo no fue buena. Es que más allá de que tuvo las mejores ocasiones de gol, el rival no era un duro escollo ni en la previa y menos aún cuando se quedó con uno menos. Pero más allá del partido en sí, el Canalla evidenció problemas y la mayoría en la zona de gestación de juego.

Central no tuvo un buen funcionamiento. El doble cinco no anduvo y los volantes por afuera tuvieron un partido discreto. Estas situaciones provocaron que nuevamente Ruben y Zampedri jueguen aislados. Pero estos problemas no son nuevos, y si bien van solamente tres partidos oficiales en lo que va del semestre en todos ellos se vieron los mismos inconvenientes.

Es por esto que Paolo Montero debe tomar nota y no sólo eso, sino que debe cambiar. El entrenador debe meter mano y si no es de nombres, debe modificar el sistema de juego.

Para lo que viene seguramente tendrá un lugar Fernando Tobio y de ser así Mauricio Martínez se ganó el derecho a que el entrenador lo ubique dentro de los once, en la mitad de la cancha. Allí podría aparecer el primer cambio de nombres y también significaría cambiar la composición del doble cinco.

Será una semana larga de preparación. Pero no hay dudas que es el momento de cambiar, modificar lo que se viene haciendo mal sin que el equipo haya conocido la derrota asoma como aconsejable. Y no hacerlo sería de necio. Central necesita una vuelta de tuercas porque si quiere ser protagonista en el torneo no se le puede volver a escapar un partido como fue el del domingo ante San Lorenzo.