El entrenador Jorge Burruchaga señaló este miércoles que no fue increpado ni agredido por barrabravas de Atlético Rafaela que se encontraban en la puerta del vestuario tras la derrota ante Temperley por la cuarta fecha del Torneo de Primera.

«No me increparon ni me agredieron. Como pasa en el fútbol, cuando no tenés resultados, la gente agrede verbalmente y dice que nada sirve. A la salida del vestuario, había cuatro o cinco de la hinchada y me acerqué a ellos para charlar un ratito. Hablar de agresión es feo, porque uno tiene familia que escucha y se pone mal», indicó.

En declaraciones a Sportia, programa que se emite por TyC Sports, el técnico del elenco santafecino agregó: «Hoy no entrenamos con custodia policial. Está la seguridad de siempre del predio, pero no hubo nada extra. Todos me llaman para ver qué pasó, pero yo sólo los escuché».

Sin embargo, el plantel se entrenó en el predio del automotor a puertas cerradas y con la presencia de policías en la puerta de entrada.

Atlético Rafaela le ganó en la primera fecha a Huracán (1-0) como visitante, pero luego acumuló tres derrotas consecutivas ante Estudiantes de La Plata (1-0), Defensa y Justicia (4-1) y Temperley (2-0) y ésta última fue la que detonó el ánimo de los hinchas, quienes decidieron insultar a los jugadores y a Burruchaga.

«Somos un equipo que se conformó con 14 jugadores nuevos. El momento es feo y también es feo tener que escuchar y hablar y que te digan que robás y que sos un desastre. Si volví a Rafaela es a trabajar, no a robar», reveló.

En tanto, al ser consultado acerca de su futuro, el entrenador remarcó: «Nunca pensé en irme, para nada. Voy a seguir hasta que termine el torneo. Tengo un año y medio de contrato».

En la próxima jornada el equipo rafaelino visitará el domingo a Atlético Tucumán, a partir de las 19:15., y del resultado que consiga depende, en parte, el futuro del entrenador en su cargo.