Por Néstor Giuria

El invicto mexicano Oscar Valdez, es el nuevo campeón mundial de la división pluma de la Organización – OMB -al noquear en dos rounds, al argentino Matías Rueda. El combate fue uno de los estelares de la cartelera del MGM Grand Arena de Las Vegas. Nevada, Estados Unidos.

En sólo cinco minutos y dieciocho segundos, liquidó un pleito en el que fue claro dominador. Con explosiva efectividad y sólido trabajo ofensivo, sometió a duro castigo al argentino. Matías Rueda nunca entró en pelea. No tuvo herramientas técnico-tácticas ni soporte físico, para soportar la contundencia del mexicano.

Desde el inicial toque de campana, Valdez impuso nítidamente su plan de trabajo, logrando el amplio dominio de todas situaciones. Con un jab punzante y penetrante, abrió caminos a combinaciones de golpes que fueron marcando no sólo diferencias a su favor, sino dejando huellas en el físico  de Rueda.

El tandilense, sorprendido, superado y desorientado, sólo atinaba a defenderse. Lo hizo con valentía, pero sin poder insinuar siquiera un vuelco de las acciones a su favor. Nunca pudo hilvanar una movida de ataque.

Al finalizar el primer round, en una exacta mezcla de izquierda y derecha, Valdez dejó en malas condiciones al argentino. El segundo capítulo fue un martirio para Matías Rueda, intentando sostener en pie y con la vertical cada vez más comprometida. Una izquierda milimétrica a la zona hepática, marcaron la primera caída del argentino. Faltando cuarenta segundos para cerrar la vuelta, Valdez con la serenidad y precisión de un noqueador, combinó golpes a la zona alta, con un voleado de derecha que puso nuevamente a su rival en la  lona. El árbitro, Rusell Mora, en acertada decisión dijo: » No va más».

Oscar Valdez, de 25 años, ex olimpico en Beijin (2008) y Londres (2012), conquistó el título vacante que había dejado el reconocido peleador ucraniano, Vasyl Lomachenko y se afirmó como uno de los boxeadores de mayor futuro en el universo pugilístico.

La diferencia notoria entre Oscar Valdez y Matías Rueda, una vez más, pone sobre la mesa el abismo existente entre el boxeo argentino y las primeras potencias. Ambos llegaron invictos a esta instancia mundial. Con carreras y records en números, parejos. Claro, Rueda con 26 triunfos ante ignotos o mediocres rivales. Valdez con roce internacional elevado ; experiencia olímpica y cruce con boxeadores de nivel. Resultados a la vista. Los milagros siempre son esperados, pero, especialmente en boxeo , cada vez están más distantes.