El boxeo rosarino siempre nos sorprende con un púgil de futuro promisorio, tal es el caso de Blas Caro, el joven deportista de solo 25 años de edad, que despierta interés en el mundo de las narices chatas.

Conclusión dialogó con Caro, que habló del pasado, presente y futuro. Por lo pronto, el muchacho del barrio Parque Casas tendrá un compromiso ante Alfredo Petkus, el sábado por la noche en la subsede Cruce Alberdi de Rosario Central.

El retador del norte rosarino habló de la previa de la pelea: «Llegamos muy bien para el sábado, hace 2 meses que no peleo y no hemos parado de trabajar. Nos faltaría ajustar el tema de las pesas, y tener mayor soltura y velocidad. En la última semana dejamos de hacer pesas y trabajamos explosión, dejó todo en cada entrenamiento».

Blas Caro no pudo hacer su debut profesional, el pasado mes de julio era la fecha de su estreno pero se debió posponer por una lesión.

El púgil de la ciudad tiene objetivos muy bien definidos: «Estoy 7º en el ranking argentino de los super gallo, quiero sumar peleas y si Dios quiere, pelear por un título argentino o latino, para tener mayor rodaje».

La historia del rosarino con el deporte, tiene su génesis en la familia: «Mis dos abuelos practicaban boxeo y siempre los miraba y me enseñaban. A los 15 años empecé haciendo kick boxing pero nunca peleé. A los 17 fui por primera vez a un gimnasio de box con la idea de pelear a nivel amateur, y poco a poco me fui enamorando del box».

El sueño de Blas Caro tiene un derrotero por delante, en el cual recién está haciendo sus primeros pasos. La meta principal es «Ser campeón del mundo y permanecer en la elite de boxeo».