Por Fabrizio Turturici

La selección argentina de Lionel Scaloni parece repetir una fórmula que, hasta ahora, le viene dando resultado: un arranque arrollador, donde generalmente se encuentra con la ventaja, y una merma en el rendimiento por la que termina sufriendo por demás.

En este contexto fue que superó por la mínima a Paraguay y aseguró su avance a los cuartos de final de la Copa América, aprovechando quince minutos de alto vuelo, coronados con el golazo del Papu Gómez, y defendiéndose como pudo por el resto del cotejo.

Es que el elenco albiceleste no esperó ni un minuto para adelantarse en el campo de juego, tomando la iniciativa para abrir tempranamente el marcador, como lo había hecho ante Uruguay, pero con el objetivo de no bajar la intensidad una vez conseguido.

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Sin embargo no pudo lograrlo y terminó corriendo locamente en un ida y vuelta donde el veloz y peligroso Miguel Almirón complicó la última línea, detrás de un doble cinco compuesto por Guido Rodríguez y Leandro Paredes que no funcionó.

Es que los volantes no pudieron escalonarse de forma adecuada ni compartir una buena dupla en el eje de la cancha tampoco para la generación del juego, mientras que en el resto del recambio, los más destacados fueron Gómez y Di María.

De cara a la segunda mitad, Argentina tuvo un atinado arranque buscando bajarle las revoluciones al encuentro, pero careció de profundidad y movilidad en ataque, por lo que Scaloni mandó a la cancha a Joaquín Correa en lugar de Sergio Agüero.

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Sin embargo, la historia de siempre en los segundos tiempos volvió a repetirse: Paraguay empezó a crecer y Argentina dejó de hacer pie en la cancha. Frente a esto, entró Rodrigo De Paul por el goleador Papu Gómez, pero la fragilidad era cada vez más grande.

Tampoco cambió mucho la dinámica el ingreso de Ángel Correa y Nicolás Domínguez por Di María y Paredes, aunque hacia el cierre supo dormir la pelota en los pies de Messi y le bajó la persiana, asegurando la segunda victoria en este arranque de torneo.

Los dirigidos por Scaloni lograron un triunfo que quizá no se condice mucho con lo que fue el trámite del encuentro, pero que igualmente le dará tranquilidad para afrontar el resto de la Copa América, donde se perfila como candidato ya con el boleto en mano.