En mayo de 2016, Conclusión te contaba la historia de Alcel Faugues, un haitiano de 31 años, nacido en Mole-Saint-Nicolas, que llegó a Rosario el 18 de febrero de 2011 para cumplir su sueño. Más allá de la carrera de Medicina para la que se había anotado, él sabía que quería ser director técnico de fútbol, una ilusión que en su país se le había negado.

Casi dos años más tarde, el sueño de formarse como profesional en la ciudad para poder ayudar a su país se encuentra cada vez más cerca. Tras haber dirigido en distintas categorías de la Rosarina en Provincial, María Reina y Unión Americana (su último club, donde llegó a pelear el título hasta las últimas fechas), un llamado telefónico le comunicó una noticia que cambiaría su vida y lo haría recordar aquellas cosas que le pasaban por su cabeza cuando llegó por primera vez al país.

Un periodista de Haití le comunicaba que uno de los clubes de la liga, el Baltimore SC (cuatro veces campeón), estaba interesado en contratarlo. Sin pensarlo, Alcel tomó el desafío y junto con Eduardo Cáceres y Hernán Carlisi, ex jugadores con vasta experiencia en clubes rosarinos y del exterior, este lunes firmarán su contrato y darán una conferencia de prensa. El sueño de ‘Ali’ de llegar a la selección de su país y darle más profesionalismo a su fútbol está a sólo un paso (o un buen torneo).

Una aventura

Tanto Faugues como Carlisi y Cáceres saben que van a dirigir un fútbol totalmente distinto que el desarrollado en la Rosarina. Lo que se encontrarán (desde el plantel hasta el estilo de juego) es totalmente una incógnita todavía, más allá de los videos que se puedan ver a la distancia gracias al Internet.

Tal como lo expresaron en esta nueva entrevista con Conclusión, lo primero que deberán hacer es conocer a los jugadores del Baltimore e intentar descubrir el talento de cada uno, sabiendo que ya de por sí el idioma es una barrera (en Haití se habla principalmente ‘kreyòl’ y francés). “Nosotros nos vamos a manejar simplemente con el idioma del fútbol, ese tan simple y tan lindo”, expresó Carlisi, quien agregó que en su trabajo intentarán inculcar algo preparado, sin improvisación, y con todo dado para que salgan bien las cosas.

Sobre el fútbol que se esperan de allá, Cáceres opinó que “similar no va a haber nada”, y que “va a ser muy difícil asimilar el jugador de acá al de allá”. “Nosotros vamos a enseñar parte de lo que nos enseñaron técnicos como Timoteo Griguol o el Indio Solari. Tenemos que tratar de que ellos se adapten a lo que le hablemos y le enseñemos, teniendo poco tiempo”, continuó el ex Rosario Central, quien al ser consultado por las principales diferencias que espera entre el jugador haitiano y la Rosarina destacó tres aspectos: picardía, movimientos y hambre de jugar.

No obstante, sostiene que estas tres características se pueden inculcar, resaltando que los partidos que ha visto ha notado que los jugadores tienen “buen toque”, pero “son como los limpiaparabrisas: juegan de costado, llegan al fondo y se vuelven.”

Finalmente, Alcel Faugues contó a Conclusión cómo fue la llegada al equipo, cuando con Eduardo Cáceres viajaron a Haití a presentar su proyecto futbolístico a la Federación de allí y luego a distintos clubes, y ante esta oportunidad ‘Ali’ se despide agradeciendo y recordando al país en donde formó sus primeras armas como entrenador: “Yo personalmente voy a tratar de representar bien a Argentina, porque soy haitiano pero soy un técnico argentino porque estudié acá, trabajé acá, toda la experiencia que tengo es gracias a Argentina, y estoy muy agradecido de este país. Argentina es mi segundo país y voy a tratar de representarlo bien”.

El tiempo dirá lo que les depara a este cuerpo técnico, pero sin lugar a dudas será un antes y un después en su vida y una experiencia renovadora para el fútbol haitiano, recibiendo técnicos profesionales en el marco de una época de crecimiento de otras federaciones y selecciones centroamericanas como Costa Rica o Panamá.

De Haití a Rosario en busca de un sueño: ser DT de fútbol