Por Enrique Genovar

Ya sabe con quién y cuándo. Central ya conoce cómo será el derrotero de partidos que tendrá en el campeonato que comenzará en pocas semanas más. Y si bien, como todos, deberá enfrentar a todos los equipos en el arranque no aparecen rivales de renombre. Y ese camino, considerando que será un equipo con varios cambios en posiciones fundamentales en la previa asoma como positivo.

Es que el equipo seguramente necesite varios partidos hasta que el entrenador encuentre la mejor versión posible. Y no tener los denominados “partidos perdibles” en el comienzo asoma como un factor positivo a tener en cuenta. Claro que como contrapartida después tendrá una seguidilla brava, incluyendo el Clásico.

A propósito del partido con Newell’s, llama la atención que el único enfrentamiento de la temporada con su rival de siembre sea en condición de visitante. Y más teniendo en cuenta que el último también lo jugó en esa misma condición.

Pero más allá de esta particularidad, hay cuestiones a tener en cuenta: Central será local de River, Boca y San Lorenzo, dos rivales que en el último tiempo y más el segundo siempre los ha visitado. Otra cuestión es el hecho de que el Canalla jugará dos encuentros de manera consecutiva en el Gigante, algo que solo comparte con la mitad de los equipos de los 28 que animarán el torneo de Primera. Los rivales a los que Central recibirá en una semana serán el Xeneize y Atlético Tucumán.

Pero más allá de todas las curiosidades a favor y en contra que le arrojó el fixture al Canalla, hay que jugar con todos. Pero sin dudas el comienzo asoma como para aprovechar, porque por más que vigencia que siga teniendo la frase de que “todos los partidos son difíciles” no es lo mismo enfrentar a los poderos de Buenos Aires en los primeros partidos que a otros equipos.

Queda poco tiempo, en pocos días más el equipo de Paolo Montero saldrá al campo para intentar ser protagonista en un campeonato. Y es por eso que el tiempo que resta será clave para que el Canalla se termine de armar y luego será el cuerpo técnico el encargado de amalgamar las piezas para formar un equipo competitivo.