Una denuncia por presunto incumplimiento del protocolo de coronavirus podría recaer sobre Rosario Central, que albergó el sábado pasado el amistoso interprovincial con Belgrano de Córdoba en el estadio Gigante de Arroyito, con triunfo de 2 a 0 para los rosarinos.

Es que las autoridades denuncian que el club auriazul no respetó las condiciones de seguridad e higiene que imponen la AFA y el gobierno nacional para la organización de partidos, ya que detectaron el ingreso de varias personas sin permiso.

Aunque la dirigencia canalla se defiende diciendo que era gente abocada a la organización, la situación es poco clara ya que la policía tuvo que retirar de la cancha a algunos que no cumplían con ninguna función específica en la delegación habilitada.

Una fuente oficial vinculada a la seguridad de la provincia de Santa Fe, le explicó a Conclusión que «los que infringen las normas de cuidado lo sabrán cuando los notifiquemos. Esto no fue una travesura», dejando en claro que habrá consecuencias.

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Y agregó que «nuestros abogados están preparando una denuncia penal en la Justicia por incumplimiento del artículo 205. Las sanciones reglamentarias serán secundarias, las habrán, si a alguien le cabe derecho de admisión, sea quien fuera, se lo aplicaremos».

Luego de apuntar que «hay videos donde dirigentes increpan a la Policía tratando de esconder gente en los palcos», desde la Fiscalía bajó un mensaje más cauto: «Se solicitaron las cámaras del club para analizarlas, está todo en proceso de análisis».

Por su parte, los directivos de Central se mostraron escépticos al tema al decir que «es cierto que había gente adentro cuando llegó la policía, pero luego salieron y fueron ingresando a medida de la lista. Eran empleados del club, Utedyc, dirigentes, seguridad».

Lo cierto es que existe la posibilidad de que suspendan el Gigante de Arroyito para lo que resta de pretemporada, lo que en este caso lo inhabilitaría a recibir un nuevo amistoso en su casa antes del arranque de la próxima Liga Profesional de Fútbol en Argentina.