El cortometraje publicitario “La luna de miel de Inés”, protagonizado por Eva Perón, se proyectó ayer por primera vez en el Museo Evita, como parte de las actividades por el 70° aniversario de su muerte.

El material inédito, de 1938, fue restaurado por el historiador Fernando Peña gracias a una iniciativa del Museo Evita y el Instituto Nacional de Investigaciones Históricas Eva Perón, con el apoyo de Mecenazgo Cultural de la Ciudad de Buenos Aires.

El corto, de apenas seis minutos, es con probabilidad el primer trabajo de María Eva Duarte frente a las cámaras y según los especialistas, seguramente fue la única publicidad fílmica que la tuvo como protagonista, aunque como modelo gráfica fue bastante frecuente su participación en diferentes piezas publicitarias.

“La maravilla del cine que tiene la facultad de traernos a Evita viva y uno tiene esa percepción de que su imagen y su ejemplo de vida, que nos marcó a todos definitivamente”, destacó el ministro de Cultura de la Nación, Tristán Bauer en la presentación.

El funcionario señaló que “rescatar la importancia que tiene Evita para nuestra historia, para la Argentina, para Sudamérica y para el mundo, todo en esa vida tan breve y tan intensa”.

«La Luna de miel de Inés» fue guardada durante décadas por la familia La Rocca, dueña de la distribuidora de cine I.N.C.A. Films de la Argentina.

“Fue un rescate importantísimo, nuestra familia guardó este incunable prácticamente y se rescató del pozo del olvido”, contó a Télam Sergio La Rocca.

“Rescatar las imágenes tan frescas, de una Evita tan joven y tan fuerte, poder legar esto al conjunto de la comunidad argentina, creo que es un mérito muy importante”, resaltó La Rocca, que confesó décadas después una “travesura” junto a su hermano Tito Livio, de cuando eran niños pero conscientes de que en una lata estaban las imágenes de Evita, así que decidieron que con unas tijeras podían recortar algunos fotogramas de ella, un desastre que décadas después debería arreglar con infinita paciencia Peña.

Justamente, fue el divulgador que sentado junto a La Rocca en el bar del Museo Evita, dio detalles de cómo llegó a sus manos el material.

«El hermano de Sergio, Tito Livio, era amigo de Carlos Caloi al que le cuenta que tenía la película”, repasó Peña.

“El Negro organizaba tertulias en su casa para ver cine a las que yo asistía y el material estuvo diez años años porque quedó en el olvido, primero por el propio Caloi y luego por su esposa María, hasta que finalmente el día del cumpleaños de Evita en 2019 se acordó y ahí llegué a encontrarme con él”, agregó.

“La Luna de miel de Inés” tiene como responsables a la agencia de publicidad Linter y la dirección de M. Casenal.

Allí se la ve a Eva Duarte de solo 20 años como la mujer prototípica de la época -o al menos como se debía ser según el imaginario de los 40- , recién casada y esperando al marido que llega al mediodía para degustar los platos que diligentemente había preparado su joven esposa.

Pero aunque cariñoso, el hombre no puede ocultar su disgusto por la comida que no está a la altura de sus expectativas porque no tiene aceite de oliva. El joven esposo le sugiere a su acongojada mujer que le pida asesoramiento a su madre. Sin embargo, para la cena la joven esposa resuelve en “problema” encontrando el gusto exacto que logra gracias al aceite Olavina, que no es de oliva pero sabía igual y «es más barato».

Por supuesto, la pieza tiene el valor testimonial de ver a Eva en su faceta como actriz, pero el argumento del corto también dio pie a una interesante interpretación de Fernando Peña.

“Es el primer material que existe con ella como protagonista, porque después toda su carrera cinematográfica fue en papeles secundarios hasta ‘La pródiga’, que sería el otro protagónico”, apuntó.

Peña analizó: “Entre estos dos trabajos, el primero y el último, me parece que está el arco de su propia vida, con un corto que habla de una chica retraída tímida y lo que sabemos en que se transformó después, una mujer empoderada, fuerte, sola, de la que habla todo el mundo y protege a los pobres y a los desposeídos”.

“Es ya una especie de profecía bastante insólita, de lo que va a ser ella, la mujer real”. concluyó.

La exhibición del corto publicitario protagonizado por Eva Duarte fue, además, la presentación del Centro Audiovisual del Museo Evita, presidido por Cristina Álvarez Rodríguez, sobrina nieta de Eva Perón y actual ministra de Gobierno de la Provincia de Buenos Aires.

“Cuando vi por primera vez este material tuve una conmoción y una emoción muy grande, porque es ver una Evita”, contó frente al auditorio colmado del Museo e interpretó la historia del corto como la contracara de la corta vida de Eva Perón.

“Quizás era el destino de cuna, pero no fue el destino de vida que ella construyó sobre sí misma, eso me parece absolutamente revelador, ya que eligió ser una mujer libre”, ponderó