La salud de la ballena beluga, cetáceo típico de la región del Ártico, que apareció desnutrida este martes en el río Sena, en el corazón de París, no mejora. No obstante, rescatistas y médicos veterinarios descartaron la eutanasia por el momento, señaló la Agencia Ansa/AFP.

La ballena blanca fue vista por primera vez el martes en el río que cruza París hacia el Canal de la Mancha y desde el viernes se encuentra entre dos esclusas a unos 70 kilómetros al norte de la capital francesa.

“Dejarla en el agua tibia y estancada entre las esclusas ya no es una opción”.

Lamya Essemlali, directora de Sea Shepherd Francia, dijo que el cetáceo «tiene que ser trasladado en las próximas 24 o 48 horas”, ya que las condiciones no son favorables para su salud.

Los especialistas tienen «pocas esperanzas» para la beluga visiblemente por debajo del peso normal, dijo Essemlali.

«Todos tenemos dudas sobre su capacidad para regresar al mar, «incluso si lo guiáramos con un bote, sería extremadamente peligroso, si no imposible», añadió.

Sin embargo, «la opción de la eutanasia se ha descartado por el momento, porque sería prematuro», señaló. La ballena todavía tiene «energía… gira la cabeza, reacciona a los estímulos», explicó.

A pesar de que los rescatistas intentaron alimentarla con arenques congelados y luego con truchas vivas, ella rechazó la comida, señala Ansa-AFP.

«Su falta de apetito es definitivamente un síntoma de otra cosa, una enfermedad. Está desnutrido y eso se remonta a semanas, si no meses. Ya no comía en el mar», dijo Essemlali.

Otra opción que se baraja es sacar a la beluga del agua, darle vitaminas, comprobar la causa de la enfermedad y enviarla de vuelta al mar para que se alimente.