La Fundación Sin Estribo presentó una medida de no innovar para solicitar que cesen las obras dentro del actual Parque de la Biodiversidad. Solicita también que la institución sea intervenida. Existen varios pedidos de informes promovidos por distintos grupos de proteccionistas que no fueron respondidos y denuncian pésimas condiciones de alojamiento.

“No es posible permitir que el Parque de la Biodiversidad continúe siendo una trampa mortal para los animales cautivos e indefensos que sobreviven a la pésima administración”, denunció la Fundación Sin Estribo.

Bajo esa premisa, la organización presentó ante la Cámara en lo Contencioso-Administrativo de 2ª Nominación una medida de no innovar pidiendo que cesen las obras dentro del ex zoo -actual Parque de la Biodiversidad-.

Lo hizo en el expediente “Fundación Sin Estribo y otros c/ Consultora e Insumos Agropecuarios SA – Amparo”, en el marco de la causa que promovió junto a la Mesa de Proteccionistas Córdoba.

La parte actora -representada por la abogada Andrea Heredia de Olazábal- reclama que la Justicia ordene la suspensión inmediata de “toda obra de edificación, construcción, derrumbe, limpieza del lago” y otras que estén afectando “de manera directa o indirecta la situación de los animales no humanos cautivos” en aquellas instalaciones.

Asimismo, pide que, hasta que se tramite la medida, los animales sean alojados en habitáculos adecuados o, de ser necesario, trasladados a santuarios o sitios aptos fuera del país, conforme evaluaciones técnicas que, según propicia, deberán realizarse con la intervención de expertos (biólogos de la accionante).

En esa línea, plantea que deberá permitirse la entrada de las amparistas para que verifiquen y controlen la situación de los animales y ordenarse que todo el plan de obras -tiempo, presupuesto, materiales, diseño y demás características constructivas- deberá, de manera inmediata, ponerse en conocimiento del tribunal, a fin de que sea evaluado.

También solicita que se los animales que están en el lugar sean declarados sujetos de derecho.

Además, la fundación reclama la intervención judicial del Parque de la Biodiversidad a raíz de las muertes de animales ocurridas las últimas semanas y en función de las denuncias por la desaparición de ejemplares en el predio.

Director

Al peticionar la designación de un interventor, la letrada Heredia de Olazábal alegó que quien cumplía la tarea de director está de licencia hace mas de seis meses.

Por lo que definió como un “calamitoso estado de situación”, y en atención a la tramitación de la causa, estimó que es indispensable que “exista un control directo, informado, verídico y actualizado” del estado de los animales cautivos, tendiente a garantizar los objetivos de la acción de amparo y a “evitar el deceso y manipulación disvaliosa de los seres”.

“La designación de un tercero que cumpla las veces de un control directo en esta entidad autárquica corresponde, por constituir el mecanismo que la Jurisdicción posee para evitar más atropellos, crueldad y muerte de seres que, como se ha dicho, deben ser declarados sujetos de derecho, siguiendo la sana jurisprudencia de nuestro país y, con ello, ver modificado su estatus jurídico y consideraciones morales de las que a la fecha se han visto privados”, añadió.

Sin Estribo recordó que ya hizo presentaciones penales por maltrato animal, al igual que el Movimiento Animalista Córdoba.

Además, destacó que hay múltiples pedidos de informes presentados por distintos grupos de proteccionistas que no fueron respondidos.

Asimismo, citó las denuncias de la oposición -del Tribunal de Cuentas Municipal y el Concejo Deliberante- por los gastos en la ejecución de la obra pública y las contrataciones directas, entre otros temas.

Cabe destacar que el Ente BioCórdoba anunció durante las últimas dos semanas en sus redes sociales el deceso de tres animales “emblema” de la institución: la cebra “Aimiri”, la yaguareté “María” y el puma “Uturungo”.

Mayo

En mayo pasado, la Fundación Sin Estribo, encabezada por Heredia de Olazábal, y la Mesa de Proteccionistas de Animales, presidida por Silvia Sastre, presentaron una denuncia por la presunta comisión de los delitos de maltrato animal e incumplimiento de deberes de funcionario público.

Las entidades apuntaron a las malas condiciones de vida del oso pardo Voldemort y de un puma que está lesionado.

Pidieron que ambos animales se declararan personas no humanas y, como tales, sujetos de derecho.

Sobre el oso, entre otras cosas, indicaron que no tenía espacio suficiente, que no recibía sol y que sufría por el ruido de las obras en el lugar.

En cuanto al puma (que era doméstico y fue secuestrado y enviado al zoo) manifestaron que -como tiene una parálisis- no podía alimentarse correctamente.

Cabe recordar que tanto “Voldemort” como sus padres, “Rita” y “Kodak”, iban a ser trasladados a un santuario de Arizona, en Estados Unidos, pero la medida se frustró como consecuencia de la pandemia.

La nueva presentación se sumó a otras formuladas durante los últimos años por la situación de los animales en el zoológico de la ciudad.

En diálogo con Comercio y Justicia, Heredia de Olazábal sostuvo que “nadie da una solución viable para los animales” y que no hay “una política seria” sobre qué hacer con ellos.

Ordenanza 13078

En su página de la red social Facebook, la Fundación Sin Estribo precisó que el 18 de septiembre de 2020 se aprobó en el Concejo Deliberante de Córdoba la ordenanza 13078, que creó el Ente Municipal BioCórdoba.

El grupo consignó que surgió a partir de la presión de la sociedad civil; principalmente ante la necesidad de cerrar y transformar el antiguo Jardín Zoológico de Córdoba por el estado de salud deplorable de los animales a causa de la crisis sanitaria y del descuido de la empresa que tenía la concesión.

Reseño que a partir de ello, el Estado local se hizo cargo del ex zoológico y puso en marcha el Ente Municipal Bio Córdoba, como autoridad de aplicación a cargo del proceso de transformación del zoo a “Parque de la Biodiversidad”.

La ONG consignó que el proyecto original fue modificado “incontables veces” y que en la audiencia pública participaron en calidad de expositores y de oyentes más de 300 personas.

“Hoy, dos años después de la creación, y a más de un año de la puesta en funciones del Ente Municipal, son sorprendentemente numerosas las muertes de animales en situaciones extrañas, son cada vez menos transparentes las decisiones que se toman sobre su salud y bienestar y el presupuesto en obra pública y los gastos millonarios no prioritarios ejecutados por el ente son mucho mayores al monto asignado para protección y bienestar animal”, denunció la fundación.

Reseñó que hay denuncias penales por maltrato animal, por experimentación con animales y por mala praxis; un amparo judicial en curso; allanamientos y exposiciones por robo y apropiación de animales.

Además, citó “casos de maltrato y violencia entre funcionarios, personal nuevo y antiguo, obligación de firmas de ‘acuerdos de confidencialidad’ prohibiendo a los empleados hablar, filmar o fotografiar el estado de los animales y sus recintos, renuncias masivas en un ‘Comité de Expertos’ externo y un Consejo Consultivo que integran numerosas y renombradas instituciones, que no es escuchado y no se le responde ninguna de sus dudas ante cada vez más oscuro panorama para con los animales”.

Sin estribo indicó que las razones principales por las que la sociedad y todos los sectores políticos en la ciudad acompañaron la creación de la institución eran la protección de los animales y la biodiversidad y juzgó que se está usando el ente autárquico municipal “para financiar obra pública y eventos masivos millonarios”, entre otras acciones.

Casos

Entre los casos de maltrato animal, la fundación citó el de la osa Melera “Matilda”, que se escapó del Parque, cruzó la Avenida Sabattini y fue encontrada en el Colegio Gabriel Taborín, y el del oso Voldemort. Expuso que está en una jaula muy pequeña, de cemento ,y hace más de un año al lado de las obras del Corredor Ambiental de la calle Rondeau (donde todos los días hay maquinaria pesada ejecutando trabajos)

En cuanto a la falta de información, sostuvo que los traslados “no son avisados ni consultados los integrantes del Consejo Consultivo” y que no hay datos en materia de bienestar animal; es decir, no hay precisiones sobre las mejoras de los recintos de los animales.

Además, citó que siguen pendientes las respuestas de los pedidos de informes presentados por Runachay Fauna; la Sala de Derecho Animal del Colegio de Abogados de Córdoba, la Mesa de Proteccionistas Córdoba y la Comisión Especial de Seguimiento y Control del Ente BioCórdoba del Concejo Deliberante de Córdoba.