Los dos cachorros de yaguareté nacidos hace 13 días en una reserva faunística de los Esteros del Iberá, Corrientes, se amamantan y permanecen en una «paridera» junto a su madre, como parte de un proyecto para reintroducir la especie, en peligro de extinción, a su hábitat natural, informó el Centro Experimental de Cría de Yaguaretés (Cecy).

“Por ahora vemos que están mamando bien de su madre y que ésta los atiende adecuadamente, pero debemos ser muy prudentes porque estamos hablando de una madre primeriza que todavía debe aprender a sacar adelante a sus crías por sí sola, sin interferencia de los humanos”, explicó la responsable del Cecy, Maite Ríos.

Se trata de las crías paridas el miércoles 6 de junio por Tania, una yaguareté llevada hasta la reserva San Alonso, en el Iberá, desde el zoológico de Batán, en el partido bonaerense de General Pueyrredón.

El padre de los cachorros es Chiqui, un macho que fue entregado en «préstamo reproductivo» por el Refugio Faunístico Atinguy de la Entidad Binacional Yacyretá en Paraguay. «Es muy importante que estos pequeños yaguaretés crezcan de la manera más natural posible, así podremos liberarlos”, agregó Ríos.

Al respecto, el ministro de Ambiente de la Nación, Sergio Bergman, afirmó que “hay muchísima expectativa sobre la evolución del Proyecto Yaguareté, para que volvamos a recuperar fauna que perdimos y que todos lamentamos, ya que sólo quedan unos 250 ejemplares en el país”.

El funcionario consideró el caso de los yaguaretés como “emblemático” y destacó que los cachorros recién nacidos «van a reeducarse para vivir y sobrevivir en un ámbito natural sin la intervención ni del cautiverio ni de su cuidador”.

El yaguareté (Panthera onca), que fue incluido como especie prioritaria en el Plan de Acción Extinción Cero, está amenazado por la pérdida de su hábitat, la caza, la persecución para evitar ataques al ganado y los atropellamientos en rutas.

«Con una inversión de 1.300.000 pesos, están en ejecución proyectos para abordar sus principales amenazas, que promueven buenas prácticas ganaderas para minimizar el conflicto con los pobladores, apoyo en tareas de control y fiscalización contra la caza furtiva y el comercio ilícito y actividades de educación ambiental», puntualizó la cartera de Ambiente.