Las aves no tienen pulgar oponible porque no tienen manos. Pero resulta que son, con los primates, el grupo de vertebrados con el mayor número de especies que se sirven de objetos.
Los descubrimientos de los últimos 20 años demuestran que las aves son también una de las más creativas. Los córvidos son actualmente reconocidos por su gran creatividad y los Psittacidae, por su capacidad de realizar actividades excepcionales. El alimoche lanza piedras a huevos para romperlos, y las garzas atraen a los peces con cebo.
Se ha visto a una grulla canadiense utilizar un pañuelo para secarse. El carpintero del desierto se sirve del pico como recipiente para transportar y sorber miel, y el águila negra africana es perfectamente capaz de lanzar objetos para atacar a otro individuo.
Otro ejemplo es el del macho del pergolero grande y su decoración de interiores. Este pequeño pájaro australiano cubre el suelo de su nido con un tapiz hecho de racimos de olores y hojas de variados colores, que completa con conchas, semillas, pequeños guijarros y objetos del mismo tono, con el propósito de atraer a su pareja.
