La orangután Samboja saltó a la fama esta semana tras conocerse que busca pareja a través de una suerte de Tinder para su especie que fue desarrollado por sus encargados en el Zoológico de Apenheul, en Apeldoorn, Holanda.

Samboja, de 11 años, mirará las fotos de sus candidatos en una pantalla y seleccionará al que más le guste, que bien puede ser un macho de Singapur. Todo sea por que se concrete el encuentro y el apareamiento.

«Muchas veces los animales tienen que volver a sus zoológicos de origen sin aparearse», explicó el biólogo Thomas Bionda al sitio The Guardian. «El manejo de emociones es una parte muy importante de la evolución. Si no interpretás bien una emoción en la vida salvaje puede ser tu final», agregó el especialista.

Con eso en mente es que la orangután Samboja recibirá una tablet reforzada (para evitar que se rompa por accidente) y en ella le acercarán las foto de sus posibles parejas.

Es propio de los orangutanes y bonobos -que son las especies más parecidas a los humanos- demostrar interés en las imágenes con estímulos positivos como dos ejemplares de su raza apareándose o acicalándose mutuamente.