La clonación es un proceso por el que se consigue una copia idéntica del organismo a partir del material genético de otro. Y, distintas partes del mundo, lo usan para replicar a las mascotas fallecidas.

La compañía Sooam Biotech, ubicada en Seúl, Corea del Sur, cobra 100.000 dólares (alrededor de 100.000 dólares) por clonar a un perro.

En sus primeros siete años de actividad, clonó 600 perros con la misma técnica que usaron con la oveja Dolly nueve años antes.

En Texas, Estados Unidos, existe otra compañía llamada ViaGen Pets, que cobra 50.000 dólares (alrededor de 50.000 dólares).

La empresa americana aseguró en su web que los animales clonados «tienen los mismos genes que los animales donantes y serán lo más parecidos posible al donante».

En cuanto a la personalidad, destacan que el ambiente y las experiencias juegan un rol fundamental. Sería el mismo caso de dos gemelos humanos: si crecen en entornos distintos su personalidad también diferirá.

En Argentina existe la experiencia del perro Anthony, un can mestizo de una familia porteña que murió de viejo a fines de 2016. Al no poder superar la pérdida se contactaron con la firma argentina BIOCAN, única representante en Latinoamérica de Sooam Biotech, para clonarlo.

Por su parte, la artista estadounidense Barbra Streisand clonó a su perra dos veces. La artista reveló a Variety que dos de sus perros, Miss Scarlett y Miss Violet, son clones de Samantha, una mascota que tuvo y que murió en 2017, con 14 años.