«La crisis inmobiliaria en China anticipa la rebelión de los trabajadores explotados por este falso socialismo»

Por Aldo Battisacco – Conclusión Buenos Aires

El profesor emérito de la Universidad de Jujuy, Benito Carlos Aramayo, dialogó con Conclusión y señaló que «el 20 por ciento del parque inmobiliario de China está sin ocupar y la burbuja inmobiliaria ha creado «ciudades fantasmas», que son hasta una atracción turística. El gigante chino Evergrande está al borde del colapso. Y

«La caída de Evergrande, corre el riesgo de convertirse en lo que fue en su momento el caso Lehman Brothers para la crisis de Estados Unidos en el año 2008. Está por verse que hará el gobierno».

Aramayo, acotó que «una quinta parte del Producto Bruto Interno de China se relaciona con el mercado inmobiliario especulativo, de allí la magnitud de la crisis. El precio de las viviendas lo marcan los inversionistas privados y no el Estado».

En el mismo sentido, agregó que el capitalismo de la China de estos día «es el resultado de la restauración capitalista impuesta en diciembre del año 1978 por la dirección del Partido Comunista de China tras la muerte de Mao Tse Tung en 1976».

La deuda de Evergrande es de 305.000 millones de dólares y equivale aproximadamente el 2% del Producto Bruto Interno (PBI) de China

La deuda de Evergrande es de 305.000 millones de dólares, es decir la mitad del PIB de Argentina, y  equivale aproximadamente el 2% del Producto Bruto Interno (PBI) de China. En los últimos años recurrió al sistema financiero y a la inversión de pequeños ahorristas para financiar la construcción de viviendas, la fabricación de automóviles eléctricos, parques de diversiones, embotelladoras de agua, la compra de un equipo de fútbol de Guangzhou y el negocio del turismo.

El catedrático explicó que la empresa tiene en desarrollo 1.300 proyectos en más de 250 ciudades de China y millón y medio de viviendas en construcción.

Sobre fines de este mes de septiembre anunció que no puede pagar sus deudas financieras ni devolver el dinero a los chinos compradores de sus viviendas.

El economista, apuntó que el titular de Evergrande, es el multimillonario Xu Jianyin, en un momento el hombre más rico de China y un mimado del Partido Comunista, a punto tal de que él le ha atribuido su éxito al Partido, al asegurar que «sin la reforma y la apertura del país (de 1978), Evergrande no es lo que es hoy», y «todo viene dado por el Partido y el Estado».

Aramayo reseñó que en el año 2018 Xu, «fue invitado a dar un discurso en el Congreso del Partido y según la consultora Cercius Group, especializada en la política de la élite china, y se benefició de las estrechas conexiones con Zeng Qinghong, ex vicepresidente del país en la década de 2000. En los actos del centenario del Partido Comunista del mes de julio pasado fue invitado y fotografiado en los actos realizados en la Plaza Tianamen, según el periódico inglés Financial Times».

Donde hay opresion hay rebelion y esto se avecina en China con los trabajadores explotados

Respecto de la palabras del presidente chino, Xi Jinping, en el debate general de la 76º sesión de la Asamblea General de las Naciones Unidas, el economista opinó que es «expresión política e ideológica de la burguesía imperialista», al tiempo que parafraseo al premier chino quien dijo: «El éxito de un país no implica necesariamente el fracaso del otro, porque en el mundo caben plenamente el crecimiento y el progreso conjuntos de todos los países».

También afirmó que «en el mundo solo hay un sistema, que es el sistema internacional centrado en la ONU». Obviamente, cuando caracteriza al régimen vigente en China se refiere al «socialismo con características chinas» y que se encuentran en la «etapa primaria del socialismo», definición que comparten todos los revisionistas del marxismo del mundo que en vida de Mao, cuando se construía el socialismo y se denunciaba al social imperialismo soviético, eran sus enemigos, convertidos ahora en apologistas prochinos.

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