MIéRCOLES, 27 DE NOV

El ministro de salud bonaerense sugirió suspender el fútbol por la segunda ola

“Después dicen no hay clases pero hay fútbol. Si es algo drástico, tiene que ser en serio para todos”, expresó Daniel Gollan en relación a posibles restricciones que podrían implementarse para bajar la cantidad de contagios. En tanto, desde AFA aseguraron que esta decisión “depende de Nación”.

 

El ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, Daniel Gollan, sugirió este lunes la suspensión del fútbol profesional entre las medidas que deben tomarse para frenar el avance del coronavirus y en la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) quedaron expectantes frente a la posibilidad de un pedido formal del gobierno nacional.

“Si empezamos con las excepciones, después dicen no hay clases pero hay fútbol. Hay que dar el ejemplo. Si es algo drástico, tiene que ser en serio para todos”, expresó Gollan en declaraciones al canal Todo Noticias (TN).

Según la agencia de noticias Télam, en la AFA tomaron nota de las declaraciones del funcionario bonaerense con la certeza de que una medida en esa dirección sólo podría llevarse a cabo frente a un pedido formal de las autoridades nacionales.

“Depende de Nación, lo tiene que pedir el gobierno”, contestó una fuente de la entidad con sede en Viamonte 1366.

De momento, el gobierno nacional “no tiene en agenda” la suspensión del fútbol, según adelantó un vocero a Télam, aunque no se descarta que la discusión pueda empezar a plantearse en los próximos días.

El ministro de Salud bonaerense advirtió que por la segunda ola del coronavirus el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) atraviesa “una situación crítica”, que requiere “medidas drásticas”.

Gollan recomendó un cierre “muy fuerte” de 15 días para limitar la circulación de personas y frenar el avance de los contagios, lo que podría incluir la suspensión del fútbol profesional.

El fútbol no está exento de la problemática ya que tuvo un fuerte aumento en los casos de coronavirus con brotes en varios planteles de la Liga Profesional.

El pasado 6 de abril, la AFA publicó un comunicado oficial con el pedido para que se cumplan “de forma estricta” los protocolos de fase 1, lo que implicó suspender las concentraciones, impedir la utilización de los vestuarios en los entrenamientos y evitar viajes en autos compartidos.

También se redujo la cantidad de asistentes habilitados a ingresar a los estadios en los días de partido y en el AMBA se prohibió que los juegos de los torneos locales se extiendan más allá de las 20 para cumplir con las restricciones de circulación vigentes hasta el 30 de abril.

La situación actual del fútbol se complejizó debido a que 13 clubes de la primera división iniciaron su participación en torneos internacionales, lo que implica viajes y concentraciones en países con alta circulación del virus.

Por ejemplo, Independiente y San Lorenzo tuvieron casos de Covid-19 detectados en los testeos rápidos en el aeropuerto de Ezeiza al regresar de Bolivia y Brasil, respectivamente.

Si bien no volvió a registrarse un brote de coronavirus como tuvieron los planteles de Gimnasia y Esgrima La Plata, Sarmiento, Independiente y Banfield, siempre se detectan uno o dos casos por plantel en los testeos preventivos que se realizan previo a cada fecha.

La mayoría de los futbolistas atraviesan la enfermedad de manera asintomática pero a la vez empezaron a conocerse casos de jugadores que sufren con algunas secuelas.

El delantero de Gimnasia y Esgrima La Plata Lucas Barrios presentó una miocarditis leve de índole inflamatoria tras recuperarse de coronavirus y no podrá volver a los entrenamientos hasta que se desinflame.

“Está bueno que nosotros le demos el mensaje a la gente: es la segunda vez que me agarra Covid-19. Tenía anticuerpos y todo, y me agarró igual”, expresó el delantero.

Muchos futbolistas también contaron las dificultades físicas que sintieron tras reintegrarse a la rutina habitual y que incluso les llevó varias semanas volver a sentirse en plenitud física.

También se vieron afectados los entrenadores que, en algunas situaciones, necesitaron una internación como le sucedió a Mario Sciacqua de Sarmiento de Junín.

Julio César Falcioni, DT de Independiente, pudo sobreponerse siendo paciente de riesgo por edad y antecedentes clínicos y Frank Darío Kudelka, de Huracán, reveló que se “asustó” por los fuertes síntomas que padeció durante el aislamiento.

La situación es similar en el ascenso y un ejemplo concreto es que el director técnico de Sacachispas, Eduardo Pizzo, está internado hace diez días por una neumonía bilateral a causa del Covid-19.

El presidente del club, Roberto Larrosa, fue muy duro con los futbolistas y aseguró que los contagios se dan porque “comparten el mate, el auto y se piensan que son Superman”.

Últimas Noticias