MIéRCOLES, 27 DE NOV

La confianza de los consumidores en la economía del país cayó por tercer mes consecutivo

La tendencia muestra que el malestar se viene profundizando desde diciembre pasado. La información se desprende del tradicional estudio del Centro de Investigación en Finanzas de la Escuela de Negocios de la Universidad Torcuato Di Tella.

La confianza de los consumidores argentinos en la economía del país cayó 1,1% en febrero, por tercer mes consecutivo, en sintonía con el rebrote inflacionario.

Si se compara con el mismo mes del año pasado, la confianza de los consumidores argentinos está un 11,6% por debajo y la tendencia muestra que el malestar se viene profundizando desde diciembre pasado.

Estos datos se desprenden del tradicional Índice de Confianza de los Consumidores (ICC) elaborado en forma mensual por el Centro de Investigación en Finanzas de la Escuela de Negocios de la Universidad Torcuato Di Tella.

El indicador de febrero se construyó sobre la base de encuestas realizadas entre el 1 y el 17 de febrero.

Sebastián Auguste, director del Centro de Investigación en Finanzas de la UTDT, dijo que la confianza del consumidor sigue en declive, por tercer mes consecutivo.

«Entre los componentes del ICC, los subíndices de Situación Personal y de Bienes Durables e Inmuebles subieron 0,6% y 4,7% respectivamente, mientras que el de Situación Macroeconómica bajó 6,2%, siempre respecto al mes anterior».

Si se analiza la distribución territorial se observa un comportamiento desigual: la confianza del consumidor por un lado sube 3,3% en Capital Federal, mientras que por el otro lado baja 1,6% y en Gran Buenos Aires y 2,5% en el interior del país.

«Por nivel educativo, al que tomamos como una aproximación al nivel de ingresos del individuo, se observa en febrero que para ambos grupos cae la confianza, pero más para los de nivel alto (2,6%) que para los de nivel bajo (0,6%)», dijo el experto.

Si bien la UTDT no lo señala, este proceso de desmejora en la confianza de los consumidores consultados coincide con el recalentamiento de precios que se viene observando desde diciembre pasado.

La inflación había sido del 4% mensual en diciembre, el dato más alto de todo el 2020; y el mismo se repitió en enero, con alto impacto en alimentos mientras que para febrero no se espera una marcada desaceleración, de acuerdo con sondeos privados.

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