Contra la persecución de la protesta social

Se realizó la charla “Conflictos, protesta y represión” organizada por la Asociación de abogados laboralistas de Rosario y por el Centro de Investigación por los Derechos Humanos “Juan Carlos Gardela” en el teatro de la Asociación Empleados de Comercio.

La jornada estuvo acompañada por un gran número de profesionales que escucharon atentamente la disertaciones de los panelistas, entre los que estuvo el juez del fuero laboral, Enrique Arias Gibert, la abogada Matilde Bruera y, en videoconferencia, el juez Zaffaroni.

En dialogo con Conclusión, la abogada Matilde Bruera expresó dijo que organizaron este evento debido a “las protestas sociales que vienen ocurriendo en todo el país y con determinadas particularidades en Rosario que son perseguidos en la justicia provincial”.

Sobre los hechos que motivaron el análisis de los Laboralistas en la ciudad, Bruera enumeró tres: la detención de los delegados gastronómicos, la represión en el barrio La Sexta y los hechos que sucedieron con los delegados de La Virginia.

“En todas las situaciones advertimos que se utilizan imputaciones penales, a nuestro criterio mal formuladas, no solo sin evidencia sino de conductas que no son delitos porque están amparadas por el derechos a la protesta” explicaba la abogada.

Por su parte el juez del fuero laboral, Enrique Arias Gibert, hablo sobre los ejes que trataron durante el encuentro, lo que significa la criminalización de la protesta y cual es el objetivo de la misma.

Al consultarle sobre lo hablado y debatido en el seminario, el juez contó que “hablamos de criminalización de la protesta, las formas de criminalización que a veces no tiene la forma de derecho penal sino también lo que es la precarización, el utilizar permanentemente la falta de empleo como una condena a perder la comida, perder el sustento. Tratamos todos los temas porque cuando un tipo que desde el Estado te puede dejar de comer, ¿hay una pena peor que esa?”.

“Hay animales que son más animales que otros” decía el Arias Gibert, mencionando una frase del libro Rebelión en la granja, haciendo un análisis sobre la protesta en general en nuestro país.

“Justamente, democracia significa que somos todos iguales, que todos tenemos el mismo poder, y democracia no se opone a dictadura. Democracia se opone a otras dos formas de poder: Oligarquía, que es el poder que tiene el dinero, y Aristocracia, que es el poder de los que supuestamente tienen mérito. La democracia es la que te dice cualquiera, sin importar como sea, vale lo mismo por que es un ser humano, tiene una manera particular de ser”, concluía el juez del fuero laboral, Enrique Arias Gibert.