Sobreseyeron por “incapacidad mental” al autor del doble crimen de barrio Acindar
Una junta médica dictaminó que el acusado de matar a su mujer y su hija de dos años “no tiene capacidad mental para comprender el hecho que cometió ni está en condiciones de afrontar un proceso penal”.
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- Abr 12, 2018
El juez penal de primera instancia Héctor Núñez Cartelle resolvió el sobreseimiento de Iván F. tras pedido del fiscal Florentino Malaponte. Iván F. fue acusado de apuñalar a su esposa y a su hija de 2 años el 24 de octubre pasado en Barrio Acíndar.
A pesar de que no hay dudas de que Iván F. fue el autor material de los homicidios, el funcionario judicial entendió que, según el informe de la junta médica, no puede ser imputado por no comprender la materialidad de los hechos que cometió ni el examen médico al que fue sometido.
Los estudios arrojaron como resultado que padece desorganización del pensamiento y alucinaciones, con riesgo de volverse crónicas. Además, hicieron saber que existe la posibilidad de que manifieste tendencias suicidas y que el cuadro que presenta es difícil o imposible de simular, por lo que recomendaron que sea internado en un nosocomio.
El imputado “no tiene capacidad mental para comprender el hecho que cometió ni está en condiciones de afrontar un proceso penal”, dictaminó la junta médica.
La audiencia, celebrada el viernes pasado en los Tribunales Provinciales ante el juez penal Héctor Núñez Cartelle pasó a cuarto intermedio para que el magistrado pudiera considerar toda la complejidad del caso e interiorizarse en la lectura de los informes, para entender acabadamente la patología que el acusado padece. Finalmente, hoy se resolvió el sobreseimiento.
El fiscal Malaponte pidió que el proceso continúe en la Justicia Civil, para que se determine su grado de incapacidad.
Iván F. sufrió un brote psicótico el día que mató a su esposa y a su hija, pero no fue la primera vez que le pasó. En enero del año pasado ya había sido internado durante dos meses por un episodio similar. Los médicos que lo atendieron antes de que cometiera el doble homicidio declararon que cuando lo iban a visitar al domicilio los atendía a los abrazos y diciendo incoherencias. Además, su jefe y compañeros de trabajo de General Motors dijeron que tenía “conductas raras”, lo que llegó a ser motivo de licencia laboral.